En días recientes, la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH) presentó el informe "Estudiar y maternar" en una plática con estudiantes de la universidad para abordar la situación que enfrentan las madres universitarias en esta institución y las necesidades que presenta este sector.
El estudio, encabezado por la activista Silvia Hernández, busca implementar políticas públicas para reducir la deserción escolar y apoyar a las mujeres que se enfrentan a la difícil tarea de ser madres y estudiantes, especialmente después del regreso de la pandemia, donde se pudo observar que muchas estudiantes abandonaron sus carreras universitarias debido al compromiso de la crianza de sus hijos.
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En entrevista, la activista Hernández señaló que a menudo estas mujeres se ven obligadas a abandonar sus carreras debido a la falta de oportunidades para equilibrar ambos roles. Las mujeres universitarias suelen ser dependientes económicamente y, al convertirse en madres, esta situación se agrava al tener que mantener a sus hijos, lo que las coloca en una situación de desventaja y desigualdad. Es importante generar condiciones dignas y respetar los derechos humanos de madre e hijo o hija.
Claudia Edita Montoya Guerrero, funcionaria contra la violencia de género y madre universitaria, destacó la importancia de generar espacios y oportunidades dignos para ejercer la maternidad. En su experiencia, la maternidad fue bastante complicada, no solo en lo económico sino también en lo social, debido al estigma que existe sobre las estudiantes que son madres. Para ella, una guardería en las instituciones educativas podría ser una herramienta valiosa para que las madres universitarias puedan asistir a clases sin tener que preocuparse por el cuidado de sus hijos e hijas.
“Es necesario que las instituciones educativas aborden la problemática de las madres universitarias y generen espacios igualitarios para ellas. La maternidad es una experiencia que trae cambios significativos en el cuerpo y en la vida de las mujeres, y es importante que se les brinde el apoyo necesario para que puedan continuar con su formación académica sin comprometer su rol como madres”, abundó.
Elba Narcía Cancino, directora de derechos humanos y género en la Unicach, destacó que estas mujeres tienen a su cargo una familia, por lo que se gestionan becas Conacyt para estudiantes madres. El estudio arrojó que hay 180 estudiantes que son madres en la Unicach entre más de 5 mil estudiantes, es decir, el 3.6 por ciento.
"Es importante reconocer que la maternidad no debería ser un obstáculo para las mujeres en su educación y desarrollo profesional. Por lo tanto, las políticas que apoyen la maternidad y la paternidad en el lugar de trabajo son esenciales para garantizar la igualdad de oportunidades para todos.”, señaló.
Asimismo, es importante proporcionar becas y apoyos alimenticios para garantizar que las estudiantes madres tengan acceso a los recursos necesarios para tener éxito en su educación. Las instituciones educativas deberían considerar seriamente la implementación de políticas que promuevan la igualdad y la inclusión de todas las personas, incluyendo a las estudiantes que son madres.
Por último, la activista puntualizó en que es necesario mencionar que nadie debería ser obligado a embarazarse al tener una pareja. Muchas mujeres son obligadas a embarazarse, lo que ha provocado que muchas trunquen sus sueños. Es importante sensibilizar y hacer conciencia entre profesores y alumnos respecto al ejercicio de la maternidad, y erradicar cualquier tipo de discriminación hacia las estudiantes que son madres.
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