“Inesperado” es el nombre de la película que ha desatado la polémica en México, debido a que se trata de una producción próvida que contrasta con la lucha que mantienen algunos grupos feministas que buscan que todas las mujeres del país tengan el derecho de abortar si así lo desean.
Pero la discusión por el tema aumentó cuando figuras públicas comenzaron a demostrar su apoyo a este material producido por el actor Eduardo Verástegui, aún más cuando se trató de políticas que actualmente ocupan una curul en San Lázaro o en legislaturas locales.
Al respecto, la diputada Olga Luz Espinosa Morales, de la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD), consideró, a título personal, que quienes ocupan cargos públicos deben guardar prudencia antes de exponerse de esa forma y hacer a un lado sus creencias religiosas al momento de trabajar, pues recordó que el clero no puede estar unido al estado laico.
Aclaro que las legisladoras a favor de la interrupción del embarazo no están promoviendo el aborto, sino que las mujeres tengan la oportunidad de decidir sobre su propio cuerpo y embarazo.
Nosotras promovemos que la maternidad no sea vista como un castigo, porque parece que creemos que todas las mujeres iniciamos iguales, las mujeres no iniciamos iguales desde nuestra condición social, porque existen mujeres indígenas, mestizas, mujeres pobres, mujeres agredidas; entonces, lo que nosotros hacemos es promover el derecho a decidir porque hay mujeres que fueron abusadas por sus padres, padrastros, hermanos u otros familiares o personas cercanas y entonces ellas merecen el derecho de decidir sobre su propio cuerpo cuando se trate de un embarazo, expresó.
Abundó que no se puede legislar basados en una película, mucho menos tomar como referencia al productor Verástegui cuando se trata de un representante del clero mexicano, cuando se supone, reiteró que el Estado está separado de la religión.
Finalmente, precisó que el tema de la interrupción del embarazo es un tema en el que todos los actores públicos deben ser muy responsables porque se trata no sólo de un tema de salud, sino de la vida de muchas mujeres de este país.