/ sábado 22 de junio de 2019

La tarde del viernes fue interceptado por personas armadas defensor de derechos humanos en Chiapas

Fue amedrentado por tres personas armadas, dos con pistolas en mano y uno con arma larga

Tuxtla Gutiérrez.- La tarde del viernes en Tuxtla Gutiérrez, fue interceptado por personas armadas el director del Centro de Derechos Humanos Ku’untik, de San Cristóbal de las Casas, Diego Cadenas Gordillo, cuando se desplazaba en su vehículo en el libramiento sur acompañado del abogado Julio César Pérez Ruiz y Romeo Cruz, uno de los representantes de los indígenas desplazados del ejido Puebla municipio de San Pedro Chenalhó.

Reportó a los medios de comunicación que “fuimos cerrados por una camioneta gris, jeep, de la que descendieron tres personas armados, dos con pistolas en mano y uno con arma larga, este último todo el tiempo nos apuntó parado frente a mi vehículo”.

Cadenas Gordillo dijo que los sujetos alegaban frente a ellos, ser parte de la Fiscalía General del Estado y que harían una revisión al vehículo, aunque –aclaró el abogado- no se identificaron, no dieron sus nombres, por ello, al informarles que llamarían a la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Gabriela Zepeda Soto, abordaron la unidad y se fugaron.

Diego Cadenas encabeza la defensa de los indígenas desplazados de los municipios indígenas de Ocosingo, Chenalhó y Zinacantán, quien en este año sufrió un atentado en atentado en San Cristóbal de las Casas, cuando desconocidos ingresaron a su domicilio, en tanto Julio César Pérez Ruiz, fue golpeado por desconocidos recientemente en aquella misma ciudad de los Altos de Chiapas.

Cadenas Gordillo cuenta con una medida cautelar para la protección de su integridad y seguridad personal por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a donde –dijo- ha reportado el último hecho en su contra en la capital de Chiapas.

Recordó que los desplazados del ejido Cintalapa del municipio de Ocosingo, salieron de sus hogares el 6 de marzo del 2009; las familias de Tenango en el mismo Ocosingo, abandonaron por violencia sus casas el 23 de enero del 2015; las personas del paraje Sulvó en el municipio de Zinacantán fueron desplazadas violentamente el 19 de diciembre del 2015.

Por otra parte, las familias indígenas de la localidad Chigtón perteneciente al municipio de Ixtapa salieron el 30 de agosto del 2012 y del ejido Puebla municipio de Chenalhó salieron el 2016.

Tuxtla Gutiérrez.- La tarde del viernes en Tuxtla Gutiérrez, fue interceptado por personas armadas el director del Centro de Derechos Humanos Ku’untik, de San Cristóbal de las Casas, Diego Cadenas Gordillo, cuando se desplazaba en su vehículo en el libramiento sur acompañado del abogado Julio César Pérez Ruiz y Romeo Cruz, uno de los representantes de los indígenas desplazados del ejido Puebla municipio de San Pedro Chenalhó.

Reportó a los medios de comunicación que “fuimos cerrados por una camioneta gris, jeep, de la que descendieron tres personas armados, dos con pistolas en mano y uno con arma larga, este último todo el tiempo nos apuntó parado frente a mi vehículo”.

Cadenas Gordillo dijo que los sujetos alegaban frente a ellos, ser parte de la Fiscalía General del Estado y que harían una revisión al vehículo, aunque –aclaró el abogado- no se identificaron, no dieron sus nombres, por ello, al informarles que llamarían a la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Gabriela Zepeda Soto, abordaron la unidad y se fugaron.

Diego Cadenas encabeza la defensa de los indígenas desplazados de los municipios indígenas de Ocosingo, Chenalhó y Zinacantán, quien en este año sufrió un atentado en atentado en San Cristóbal de las Casas, cuando desconocidos ingresaron a su domicilio, en tanto Julio César Pérez Ruiz, fue golpeado por desconocidos recientemente en aquella misma ciudad de los Altos de Chiapas.

Cadenas Gordillo cuenta con una medida cautelar para la protección de su integridad y seguridad personal por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a donde –dijo- ha reportado el último hecho en su contra en la capital de Chiapas.

Recordó que los desplazados del ejido Cintalapa del municipio de Ocosingo, salieron de sus hogares el 6 de marzo del 2009; las familias de Tenango en el mismo Ocosingo, abandonaron por violencia sus casas el 23 de enero del 2015; las personas del paraje Sulvó en el municipio de Zinacantán fueron desplazadas violentamente el 19 de diciembre del 2015.

Por otra parte, las familias indígenas de la localidad Chigtón perteneciente al municipio de Ixtapa salieron el 30 de agosto del 2012 y del ejido Puebla municipio de Chenalhó salieron el 2016.

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