En la frontera sur de México es inevitable el flujo migratorio, dónde Chiapas comparte con Guatemala la mayor parte de kilómetros de límite internacional, si bien se ha logrado contener la caravana en Centroamérica que salió con destino a esta entidad, persiste el deseo de migrantes de llegar a la república mexicana, a pesar de las condiciones precarias.
El director de la División de las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, dijo que persiste el interés de llegar a la frontera sur de México de otra caravana, es inevitable la migración a pesar de que el gobierno de los Estados Unidos ha hecho todo lo posible por desmantelar la fuerza de migrantes.
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Durante un conversatorio con experto de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Refugiados y del Instituto Tecnológico de Monterrey, insistió que persiste el interés de los Estados Unidos de ligar a México a darles seguridad, protección, salud y trabajo, lo que constituye un retroceso en el derecho internacional.
En la frontera sur al igual que en la norte se han documentado abusos, mientras que la Guardia Nacional (GN) está dedicada a controlar a mujeres, niños y hombres que huyen de la violencia, que eliminan aspiraciones a los que buscan mejores condiciones de vida, añadió.
Sobre la relación bilateral, migración y derechos humanos en tiempos de Covid 19, añadió que seguirá la lucha de los migrantes a pesar de la persecución de migrantes, del interés de dividir a las familias y secuestrar a migrantes, falta protección y atención a los migrantes.
El diputado federal Porfirio Muñoz Ledo, expuso que la tarea pendiente es abrir la frontera sur donde la Estación Migratoria Siglo XXI del Instituto Nacional de Migración en Tapachula, brinda un trato violatorio de los derechos humanos, es un centro muy grande.
El sur es un desastre, la sociedad civil y organizaciones religiosas han establecido una estrategia de atención en albergues, el 97 por ciento de la migración viene de Guatemala, Honduras y el Salvador, el 60 por ciento d ellos migrantes desean quedarse en México.
En Chiapas había una aglomeración de migrantes, pero ahora están en varias partes del país, hay una gran circulación de migrantes y estamos buscando en México ciudades refugio; México no debe criminalizar la migración irregular.
Dio a conocer que el 10 de mayo los migrantes mexicanos en los Estados Unidos enviaron en remesas a México por 3 mil 379 billones de dólares, el mayor ingreso, cifra de un solo día, el triple que el petróleo.
Mientras tanto, Luciana Gandini, investigadora de la UNAM y directora del Seminario Universitario sobre Desplazamiento Interno, Migración, Exilio y Repatriación, sostiene que falta protección y atención para estas personas que pasan, permanecen y regresan, las políticas migratorias van en sentido diferente, las deportaciones están violando el debido proceso, sin la falta de controles sanitarios y sin sana distancia o sin sana vivienda o con albergues hacinados, una militarización para el control migratorio es un hecho histórico pero las caravanas no se van a acabar.
A su vez, Santiago Corcuera, miembro de la Junta de Síndicos para la Cooperación Técnica en Materia de Derechos Humanos de la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, sostuvo que se debe evitar la detención y el hacinamiento.
La detención solo se permite como medida excepcional, no cómo regla general, niñas y niños migrantes, niñas y niños con sus familiares no deben ser detenidos en el contexto de las políticas de migración, deben ser puestos en libertad inmediatamente, los estados receptores deben proteger a los refugiados.
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