Como un trato inhumano, calificó Esther Díaz, de 60 años de edad, al permanecer más de cuatro horas bajo el sol para poder pagar su impuesto predial en las oficinas de la coordinación General de Política Fiscal de la tesorería Municipal de Tuxtla Gutiérrez.
“No es posible que, como personas de la tercera edad o madres con niños en brazos que tenemos la necesidad de pagar los impuestos, no se nos dé un trato adecuado y digno. Estar de pié y más de cuatro horas bajo el sol es denigrante, algunos abuelitos ya se desmayaban; no es posible que la administración de Carlos Morales no tenga consideración y pueda prever el pago en otra sede”, señaló la entrevistada.
Aunque autoridades han instalado unas lonas de temporales para sombra, el calor y la deshidratación son factores que sufren todos los contribuyentes que llegan a liquidar sus adeudos.