Durante su conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador, pidió a la población estar pendientes de todo lo que ocurra durante el juicio de Emilio Lozoya, pues aseguró que “es mucho, muy importante que se le de seguimiento al caso”, consideró que todos los mexicanos debemos estar informados sobre esto.

El presidente consideró que la población se debe informar pues el caso “involucra a la llamada sociedad política y puede caber la intención de que pase de noche este asunto”, por ello hizo el llamado a que “estemos muy pendientes de todo lo del juicio, que no sea un asunto nada más de tribunales.”

Consideró López Obrador que siguiendo este caso, se puede conocer cómo sobornaban lo que, dijo, “coloquialmente se llamaban moches” agregó que para que se entienda mejor a estos procesos se les llama “mordidas” aunque, consideró debería ser conocido como “tarascadas”.

Nos tenían acostumbrados a hablar de mordidas con referencia a lo que se entregaba a un funcionario público menor, un agente de tránsito, un oficinista, esa era la mordida

Sin embargo, el presidente consideró que no se hablaba en realidad acerca de los cuantiosos sobornos que se daban a funcionarios de mayor rango pues “no se hablaba de eso” e hizo referencia cómo se premiaba y reconocía a los corruptos considerándoseles muy hábiles, astutos que sabían aprovechar la oportunidad para hacerse grandes con la riqueza mal habida.

Consideró Obrador que el dinero se entregaba para recibir contratos que afectaban la hacienda pública y el presupuesto público que “es dinero del pueblo, porque antes se pensaba que el presupuesto era dinero del gobierno”, agregó que en realidad los funcionarios “somos simplemente administradores de los dineros del pueblo”.

“Los anteriores eran muy malos administradores, corruptos, entonces había desfalcos, se afectaba el patrimonio público, por eso la pobreza”

Recordó que fue de esta forma como la empresa Odebrecht usó este sistema y que “el colmo es que se compró la llamada Reforma Energética, es decir, se sobornó, se le dio mordida a los legisladores para que aprobaran esa reforma que nos hizo daño”.

Finalmente, consideró que este caso es un parteaguas que va a ayudar mucho a que se conozca sobre la corrupción, pero no sólo eso pues agregó que van a “ver qué podemos recuperar de lo robado, lo más que se pueda”, aseguró que ya hay un ofrecimiento que por el sobreprecio que pagaron en la compra de la planta de fertilizante, el nuevo dueño acepta devolver 200 millones de dólares.