Cintalapa. Hace algunos años, Doña Sofía Camacho Calderón decidió crear un grupo de amigas para reunirse de forma periódica, tomar el té, platicar, compartir experiencias de vida, sin imaginar que esa idea perduraría por más de tres décadas, este grupo Lleva por nombre (CH-P-T) que quiere decir “Chingonas Para Todo”.

Este sábado 26 de febrero CH-P-T celebró sus primeros 34 años de estar y permanecer juntas a pesar de la pandemia y a pesar de muchas cosas, han buscado la forma de seguir haciendo lo que para ellas ya es una costumbre muy bonita.

Platicando con Doña Sofía, ella nos dice que todo inició en 1988, y desde entonces, las integrantes se reúnen para celebrar los cumpleaños de todas, para pasársela bien, para disfrutar de la vida y también para apoyarse en las adversidades.

“Durante el año programamos viajes, gracias a Dios ya conocemos toda la república mexicana, ya hemos ido hasta Guatemala, en diciembre vamos a visitar a la virgen de Juquila en Oaxaca, vamos a La Mesilla, a San Cristóbal, vamos a restaurantes, nos divertimos mucho”, dijo la fundadora.

Mencionar que este grupo tienen varias características, cada que celebran el cumpleaños de una integrante, la festejada pide el color de la ropa que van a ocupar para esa fiesta y todas ese día, llegan vestidas con el color elegido, de modelos diferentes pero el color si tiene que ser el mismo, a la cumpleañera le apoyan una cantidad de dinero para los gastos que se hacen.

Cuando algún familiar de ellas fallece, de igual forma se nota la hermandad, apoyan de manera económica y están ahí acompañándola en su dolor, porque dicen que “todas juntas en las buenas y en las malas”.

Recalcar que cada que celebran aniversario del grupo nombran a una reina, y en este 2022 la elegida fue la señora Aida Concepción Dagnino López, quien agradeció a sus compañeras que la hayan distinguido con este nombramiento, se comprometió a ser digna representante del grupo y que con orgullo portará la corona por todo un año.

Para esta celebración cada integrante llega acompañado de su familia, en su mayoría son personas de la tercera edad, conviven, bailan, se la pasa bien y disfrutan de la vida en esta etapa que Dios le ha permitido llegar.

Hasta el momento no se hay registro de que alguien haya perecido por la pandemia, se han cuidado, porque ellas dicen que quieren seguir reuniéndose por varios años más.