La Encuesta Nacional de Victimización de Empresas (ENVE) del 2021 indica que el año pasado en Chiapas hubo mil 657 unidades económicas víctimas, contra mil 678 del 2019, los dos delitos más frecuentes más frecuentes fueron la extorsión y el robo o asalto de mercancía, de dinero, insumos y bienes.
Precisa el Instituto Nació al de Estadística y Geografía (INEGI) que el costo del delito el año pasado en Chiapas por unidad económica fue de 39 mil 144 pesos, por lo que el costo total en agravio de las empresas sería de 64 millones 861 mil 608 pesos.
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De acuerdo con la institución federal, el horario más frecuente en el que se cometen los delitos es de las 12 del día a las seis de la tarde, en la mayoría de las entidades del país los delitos se cometieron en ese mismo horario.
La cifra negra según el sector y el tamaño del mismo, el 90.5 por ciento se cometió en empresa del sector comercio, también fueron afectadas el 89.5 por ciento de industrias y el 93.7 de los servicios, impactando a las microempresas, a las pequeñas, a las medias y a las grandes.
En el 2022 los principales problemas son la inseguridad y delincuencia, la falta de apoyos del gobierno, los trámites con el gobierno, la corrupción y los desastres naturales, mientras que en el 2020 fueron el bajo poder adquisitivo de la población, los impuestos, la falta de castigo la delincuentes, la mala aplicación de la ley y la mano de obra poco calificada.
El INEGI indica que en el 2020 la percepción de inseguridad en Chiapas fue del 85.3 por ciento, para el 2022 es del 69.8 por ciento; las unidades económicas manifiestan sentirse inseguras en este año lo mismo que en el 2020 al transportar productos en carreteras, al movilizar productos en corredores industriales, al hacer compra venta en central de abasto, al hacer transferencias en bancos y al hacer compras ventas en centros comerciales.
Las unidades económicas que manifestaron haber tomado una acción como consecuencia de haber sido víctimas de algún delito, redujeron los horarios de producción o comercialización, dejaron de manejar dinero en efectivo, cancelaron inversiones, dejaron de comercializar o hacer negocios, los dueños dejaron de salir, además, manifiestan sentirse afectadas por el comercio informal.