Tapachula se ha convertido en una de las ciudades del país con mayor presencia de haitianos, debido al arribo masivo desde la isla que padece de crisis económica política y social.
La actual pandemia ha dejado varados no a cientos, sino a miles de extranjeros provenientes de este país, destrozado por un sistema político corrupto, según los mismos haitianos, y una herida que no los ha dejado sanar desde el terremoto de 2010.
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A su llegada a México, Chiapas es una de las primeras puertas que tocan, debido a que la mayoría proviene de Sudamérica.
La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados ha alertado sobre el alto número de peticiones de refugio que realizan los haitianos en México y, principalmente, en Tapachula.
Expuso que en 2018 el número de solicitudes de refugio ante esta instancia fue de sólo 76 personas, sin embargo, para 2019 la marejada de los provenientes de la isla se acrecentó de manera descomunal, con una cifra de más de 5 mil solicitudes.
Andrés Ramírez Silva | coordinador general de la Comar en México
“Los haitianos no figuraban dentro del top 5 de nacionalidades que pedían refugio en México y en Chiapas, ahora son el número dos en Chiapas, sólo por detrás de los hondureños”, explicó.
La pandemia ha provocado una baja general a causa de la contingencia, pero aun así la alta incidencia de arribo de extranjeros provenientes de este país persiste, según la Comar.
En el primer semestre del año, es decir, de enero a junio de 2020, sumaron un total de 3,661 ciudadanos haitianos que solicitaron la condición de refugiados en Tapachula, que llegaron a México debido a la situación convulsa en su país.
“La mayoría de los haitianos llevaban mucho tiempo fuera de su país, algunos incluso poco tiempo después del terremoto, ya que salieron a buscar nuevas oportunidades de vida y se instalaron en Chile y Brasil, después comenzaron a salir en desbandada de estos dos países hacia México”, apuntó Ramírez Silva.
El funcionario explicó que ahora la situación que preocupa a la Comar es la discriminación que hay hacia los grupos vulnerables, como lo migrantes, debido a que no se les brindan oportunidades durante su estancia en México.
“Hablo de situaciones que no los dejan trabajar, comprar o ingresar a algunos sitios, eso nos preocupa porque nos crea un foco de riesgo social para esta comunidad vulnerable”, apuntó.
En la actualidad, los haitianos y grupos de migrantes de otras nacionalidades, se han visto en la necesidad de dedicarse a mendigar en las calles de Tapachula o a las vendimias de comida, aguas u otros productos comestibles.
El coronavirus ha aletargado aún más sus posibilidades de encontrar nuevas oportunidades de vida en el sur de México.
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