A 7 mil 834.5 millones de pesos asciende la deuda que a finales de 2018 en la entidad los contribuyentes sostenían con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), a la postre el monto más alto de los últimos cinco años.
El pasivo correspondía a 13 mil 877 pagadores de impuestos, equivalente a apenas 0.7 por ciento del padrón de causantes de Chiapas. Significa un alza de 12 por ciento en comparación con 2017. Sin embargo, en la práctica para el estado representa el universo de contribuyentes morosos más grande del último lustro.
El órgano recaudador informó que dos mil 668.6 millones de pesos eran “factibles de cobro”, categoría en la que entran los créditos fiscales en notificación, en proceso de cobro, intervenciones, parcialidades y remate, fincados a un conjunto de cinco mil 675 pagadores. Representa 34 por ciento el total.
Asimismo, tres mil 435.3 millones de pesos eran “controvertidos”, rubro en el que están las deudas que 273 causantes impugnaron ante la justicia. Hablamos de la cantidad que está en litigio más importante del último quinquenio.
Además, mil 710.6 millones de pesos estaban considerados con “baja probabilidad de cobro”, categoría a la que pertenecen los compromisos de un total de siete mil 929 contribuyentes que estaban en comprobación de incobrabilidad, en proceso de baja, insolventes o con los pagadores no localizados. Significa la suma más alta de 2014 a la fecha.
El docente de la Universidad Regiomontana, Juan Carlos Pérez Góngora, mencionó que a pesar de que tiene un enfoque social el nuevo gobierno federal planea atacar la elusión fiscal en todos los frentes. Prueba de ello es que al menos al inicio de este ejercicio no hay un programa de condonación y/o facilidades de pago. A ello hay que agregar el incremento en la captación que las nuevas autoridades estiman en los Impuestos Sobre la Renta (ISR) y al Valor Agregado (IVA), pese a que la tasa de esos gravámenes fue reducida en la frontera norte.
Este año en México los ingresos tributarios serán cercanos a los tres billones 287 mil 605.4 millones de pesos, 23 mil 768 millones de pesos más respecto a 2018. El 53 por ciento será aportado por el ISR y la ampliación estará basada en el combate a la evasión y a las empresas “fantasma”, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público federal.
Para la presidenta del Colegio de Contadores Públicos Chiapanecos, Beatriz Adriana Álvarez Velasco, los principales afectados de la política impositiva que seguirá la administración pública federal en el primer año del sexenio serán los pequeños y medianos pagadores de impuestos, especialmente quienes efectúan actividades empresariales, debido a que ahora no podrán usar los saldos a favor de sus cargos fiscales para cubrir otros compromisos, es decir, con el nuevo gobierno desapreció la compensación universal.
Al cierre del ejercicio anterior en la entidad había un millón 800 mil 785 causantes. Representó un aumento de 16 y 131 por ciento en contraste con diciembre de 2018 y diciembre de 2012, respectivamente, según el SAT.