Tuxtla Gutiérrez.- El presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), Juan José Zepeda Bermúdez, pidió a los gobiernos federal, estatal y municipal, generar las condiciones para que todas y todos los habitantes, todas las regiones, tengamos las mismas oportunidades de acceso al desarrollo.
Tenemos que cambiar el rostro y la marcha de la nación y del estado, mejorar las expectativas de la vida de los mexicanos, estamos muy lejos de abatir la infamante desigualdad, y consideró que la colaboración con Chiapas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), será fundamental para atender a los que sufren pobreza y exclusión.
Zepeda Bermúdez expuso que en México y la entidad, la desigualdad no es una brecha, es un abismo, siglos lo han provocado, aun en la desigualdad económica y social, los estados nacionales y sub nacionales deben ser garantes de los derechos y las libertades de la sociedad.
Precisó que los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), son la ruta, la carta de navegación, el camino para la felicidad de todos, hagamos de ellos un estilo de vida, los presidentas y presidentas municipales tienen que seguir la dirección de los ODS, para poner fin a la pobreza, reducir la desigualdad y proteger nuestro planeta.
El desarrollo humano es un derecho que tenemos que construir desde lo local, la priorización de las obras en el Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal (COPLADEM), es una acción concreta, local y democrática, todas las personas sin distinción tengan las mismas oportunidades de desarrollo, no es válido que esas oportunidades de acceso sean diferenciadas, y más grave aún, que las diferencias provengan de transgresiones al marco jurídico, enfatizó.
“Digamos no, definitivamente no, a las malas prácticas de los COMPALDEM, no a los pagos en efectivo, violentan los derechos humanos, se pueden hacer las cosas bien, si el dinero público se utiliza bien, si cada peso del presupuesto es un peso de beneficio para la gente y si se trabaja de manera honesta para hacer justicia y atender las necesidades más urgentes de la población, para erradicar los tres binomios de la injusticia, la inseguridad y violencia, la impunidad y corrupción, la desigualdad y pobreza, para reconstruir la reconciliación y paz en Chiapas ”.
Explicó que el vínculo entre los derechos humanos y el desarrollo es muy estrecho, “estrechísimo”, ambos deben conducir al bienestar de las personas, con trabajo estamos obligado a generar una nueva cara de México, el desarrollo tiene que ser un proceso de expansión de las capacidades de que disfrutan los individuos.
Bajo esta consideración, el ombudsman de Chiapas sostiene que el desarrollo humano consiste en ejercitar nuestras capacidades y en tener la mayor oportunidad de realizarlas con el fin último de alcanzar el bienestar individual y colectivo.
En un panorama donde se viven enormes desigualdades, entre las personas y las diferentes regiones, se vuelve perentoria la necesidad de promover y respetar el derecho humano al desarrollo, juntos tenemos que asumir las propuestas del PNUD para transformar a los municipios y que cuenten con una guía para caminar hacia el desarrollo humano en Chiapas, diseñando soluciones desde lo local.