Una madre en Chiapas, Adriana Gómez Martínez, integrante del Colectivo Madres en Resistencia, ha expresado su descontento y denunciado la falta de apoyo de ciertos grupos y autoridades en la lucha por la justicia para las familias de las víctimas de feminicidio. Gómez Martínez cuestiona la ausencia de solidaridad por parte de algunas feministas y critica la falta de avances desde la declaración de la alerta de violencia de género emitida en 2016 por la Secretaría de Gobernación.
Gómez Martínez es madre de Jade Guadalupe Yuing Gómez, quien fue asesinada el 14 de enero de 2020 en las instalaciones del Instituto del Deporte en Tuxtla Gutiérrez. Desde entonces, ha enfrentado persecuciones y amenazas, lo que llevó a su familia a tener que cambiar de domicilio por seguridad. En una entrevista, compartió el profundo dolor que implica la pérdida de una hija.
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La madre de la víctima se pregunta dónde están las feministas que claman "si tocan a una, tocan a todas" en el Día Internacional de la Mujer, señalando que algunas de ellas trabajan para el gobierno y tienen beneficios personales, mientras que las madres víctimas sienten el dolor directamente en carne propia. Gómez Martínez reclamó la inexistencia de una red de madres víctimas de feminicidio que las apoye y señaló la difamación por parte de ciertas personas asociadas a la Fiscalía General del Estado.
Adriana Gómez relató que la Secretaría General de Gobierno, responsable de la aplicación de acciones para atender la alerta de violencia de género, tampoco se ha acercado ni brindado apoyo. A pesar de las dificultades, ella y otras madres han caminado solas, buscando ayuda, saliendo a las calles y exigiendo justicia para sus hijas, luchando por su acceso a la justicia. Sin embargo, las alertas emitidas hace seis meses no han tenido el impacto esperado.
La madre afectada contó que colectivos feministas como Repare y 50+1, que han marchado en el Día Internacional de la Mujer, tampoco se han acercado a ellas. Criticó la indiferencia hacia la lucha de las madres víctimas, alegando que algunas de estas feministas trabajan para el gobierno y reciben salarios, mientras que las madres han sufrido una pérdida irreparable. Gómez Martínez señaló que ellas no se dejan comprar y movilizan con sus propios recursos.
Además, acusó a la Fiscalía de ser omisa, negligente y corrupta, y sospecha que algunas de las supuestas feministas pasan información a la fiscalía, mientras que a ellas les niegan acceso a la información de sus casos. También criticó la falta de avances en las carpetas de investigación por parte de la Comisión de Atención a Feminicidio del Congreso del Estado y mencionó que ha buscado ayuda incluso del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, sin encontrar respuesta favorable.