Será hasta el mes de marzo cuando se defina el rumbo del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en asamblea nacional, para la cual se han ido construyendo dos propuestas: una consiste en dejar el registro en manos de la sociedad y, la segunda, propone conservarlo con un nombre distinto y eliminar las corrientes internas, dijo Saraín Osorio Espinosa.
El dirigente de la Coordinadora Independiente de Organizaciones afirmó que la Comisión Nacional encabeza los trabajos, y en cada estado se nombrará una comisión provisional de cinco personas que convoque a una nueva reorganización para participar en el evento nacional.
Indicó que están en elaboración los nuevos estatutos de la nueva fuerza política, en caso de que la mayoría determine la vigencia del partido con nombre distinto; por lo pronto han desaparecido todas las corrientes ideológicas, grupos y cuotas de poder que causaron enorme daño por la falta de acuerdos.
Osorio explicó que el colapso del PRD se generó por los pactos con los gobiernos y también por la salida de limitantes para formar otros partidos como el Movimiento de Regeneración Nacional; en Chiapas –agregó– se generó el fortalecimiento del Partido Verde Ecologista de México, Chiapas Unido y Mover a Chiapas, y se debilitó al PRD; “los del PRD oficiales se fueron a los partidos oficiales”, asentó.
Apuntó que en la entidad desde Palacio de Gobierno se daban las instrucciones para manipular, manosear al PRD y a sus militantes; así surgieron las dirigencias de Luis Raquel Cal y Mayor Franco, de Alejandro Gamboa, de César Espinosa Morales, y otros, aunque mucha militancia que fue leal sigue creyendo y se mantiene firme a que se conserve el registro.