De enero a marzo pasados, Chiapas reportó cinco mil 83 compradores de carros nuevos. Representó una baja de 3.6 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2018. Aunque en el Sur Sureste fue la tercera entidad en la que las agencias tuvieron más clientes, al extrapolar los datos al orden nacional al estado apenas le alcanzó para colocarse en el sitio 19, según la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
La docente de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), Campus Chiapas, Karina Magdalena Alfonzo Aguilar, dijo que la transición gubernamental generó incertidumbre en los consumidores. Esta situación inhibe la comercialización. De “cómo pinta el año” y las promociones de las concesionarias dependerá si la dinámica continúa o cambia.
Durante un estudio efectuado por el campus en la capital de la entidad, sólo 16 por ciento de la gente entrevistada planea hacerse de un coche. El problema es que 93 por ciento de las personas que participaron tiene vehículo. Bajo esas circunstancias, es evidente que en este ejercicio en Tuxtla Gutiérrez la compra de carros estará de capa caída, afirmó.
Para la AMDA hay otro factor que fue determinante en ese comportamiento: el endeudamiento de los hogares. Las familias de todo el país tienen un poder adquisitivo limitado, debido a que tienen muchos compromisos financieros.
“Actualmente los tuxtlecos están optando por cambiar de automóvil en menos tiempo, con la intención de adquirir modelos más recientes, sin importar que puedan endeudarse hasta por más de cuatro años”, destacó Alfonzo Aguilar.
Ante las condiciones imperantes, recomendó a la población valorar sus decisiones de compra, porque la inestabilidad económica vigente puede afectar drásticamente los costos que implica tener un automotor.
Si desea hacerse de un automotor sólo porque tiene dinero, a largo plazo la inversión será más efectiva en el rubro de bienes raíces que en el automotriz, puntualizó.
En 2015 en el estado existía al menos un automóvil o camioneta en sólo 19.5 por ciento de sus hogares. Era la proporción más baja del país, seguida de la correspondiente a Oaxaca (21.4 por ciento) y Guerrero (21.8 por ciento), de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Sólo 16 por ciento de la gente entrevistada planea hacerse de un coche. El problema es que 93 por ciento de las personas que participaron tiene vehículo. Bajo esas circunstancias, es evidente que en este ejercicio en Tuxtla Gutiérrez la compra de carros estará de capa caída.