La cancelación del programa de zonas económicas especiales (ZEE) del gobierno federal representa para el estado y especialmente para Puerto Chiapas el fin de una iniciativa susceptible a malos manejos, con resultados inciertos y que sólo existió en papel, según el Club de Industriales de la entidad (Cich).
El presidente del gremio, Héctor Francisco de la O Santana, dijo ayer que en el mundo las ZEE fueron acompañadas más por el fracaso que por el éxito. Para colmo, los responsables de ese plan en el estado “nunca fueron claros realmente”. No obstante, en lo mucho o poco que las autoridades hicieron “se gastó una gran cantidad de dinero”.
La incertidumbre era una de las características más notorias de la estrategia. Además, los efectos serían limitados. La extensión de la ZEE de Puerto Chiapas era sólo de ocho mil hectáreas, cuando la entidad tiene más de 70 mil kilómetros cuadrados; además, buena parte de la superficie correspondía a un parque agroindustrial que en el sexenio pasado la Federación construyó cerca de esa terminal marítima, afirmó.
Para él, para que en el estado pueda desarrollarse un proyecto de ese tipo primero hay que generar un clima de negocios favorable, la condición que el empresariado busca más para aterrizar su capital.
“No estamos solos. Las economías de Japón, China, Alemania (…) toda la comunidad externa está deseosa de invertir. ¿Qué es lo que requieren? Generar las condiciones, las capacidades (…) El dinero no desaparece. Va a los lugares a donde lo inviten y conviene estar como capital de inversión. Hay que hacer la parte que nos corresponde”, aseguró.
Después, aseveró, hay que optar por un programa de alta factibilidad para el estado. Por los más de 650 kilómetros de frontera que comparten, una iniciativa integral de desarrollo de la zona limítrofe entre Chiapas y Guatemala sería, desde su óptica, la mejor alternativa para establecer un “sistema de economía agresiva”. Ese plan ayudaría a mitigar la migración, fenómeno que se acentuó desde el año pasado.
“Vamos a hacer las cosas bien, con los pies en la tierra, organizados. Hay que hacer una planeación adecuada, organizarnos desde un principio y una vez que tengamos las condiciones óptimas puede hacerse una zona de desarrollo económico”, puntualizó.