Tuxtla Gutiérrez.- Luego del sismo de magnitud 6.6 ocurrido la mañana del viernes, en la capital Tuxtla Gutiérrez y algunos municipios como Cintalapa, las clases fueron suspendidas.
Los padres de familia angustiados llegaron a las instituciones educativas, para llevar a casa a sus niños. En algunas escuelas de la ciudad se reportaron daños, los cuales fueron leves.
Además, cientos de trabajadores salieron de sus centros de trabajo y se resguardaron en puntos seguros, solo algunas personas manifestaron crisis nerviosa
Hasta ahora las autoridades de Protección Civil estatal no ha reportado víctimas mortales o perjuicios mayores.
En la zona fronteriza del sur de México, la gente salió de sus casas y oficinas, algunas personas reportaron cuadros de pánico, sin embargo, hasta el momento no hay un reporte de daños a infraestructura o a la salud de la población.
Una vez pasado el sismo, fue notoria la falta de contacto por telefonía celular, no había servicio de llamadas desde las líneas de Telcel aunque los teléfonos fijos sí estaban funcionando con normalidad y en los celulares la comunicación era posible vía mensajes y WhatsApp.
Las alarmas sísmicas supuestamente instaladas para alertar a la población no sonaron en ningún momento.