Un eventual retorno del semáforo epidemiológico del naranja al rojo en Chiapas sería muy complicado ya que hay emprensas, franquicias y sucursales cerradas por la crisis generada por la pandemia del coronavirus, ya no les da para aguantar más suspensión de actividades y no tenemos un programa de reactivación, expuso el presidente de la Coparmex local, Manuel Felipe Pardo Pastrana.

Durante un foro de análisis de la situación económica organizado por la Facultad Libre de Derecho (FLD), dijo que la economía se está cayendo, los recursos de los programas sociales de la federación que llegan a Chiapas no son una garantía para superar la crisis.

Requerimos de una reactivación vía infraestructura porque es deficiente, detonar la carretera San Cristóbal de Las Casas – Palenque, como complemento del proyecto del Tren Maya, y que se hace necesario generar alternativas debido a que en las últimas semanas ha habido bloqueos en la carretera actual que causan afectaciones.

También deben eficientarse el uso de los recursos públicos y combatirse frontalmente la corrupción y la impunidad, una modernización de los servicios del Registro Pública de la Propiedad, Comercios y Servicios, mejoramiento y servicios de la infraestructura turística porque la ocupación hotelera no son sujetos de créditos y llevan tres meses sin estados financiero, con una ocupación casi a cero.

Pardo Pastrana plantea reactivar la industria del café en la agricultura, la reactivación de la ganadería y mejorar el ambiente de negocios, generar certidumbre para continuar con el proyecto de construcción de la Central Hidroeléctrica Chicoasén II que se suspendió por presión social.

Dentro de la estrategia de la iniciativa privada se plantea la creación del Consejo Estatal de Desarrollo Económico para generar y eficientar las energías renovables, fomentar el turismo de aventura, cultural y gastronómico, pues de acuerdo con un sondeo de empresarios, la caída del Producto Interno Bruto de Chiapas es del 30 por ciento, no crecemos desde el 2016, aunque la contracción económica viene desde el 2012, hace falta circulante y hay empresas que están cerrando.

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El ejercicio de los presupuestos públicos debe tener un efecto multiplicador, no tenemos industrias que generen un fuerte impacto, de acuerdo con los censos económicos del 2019, son 304 mil 425 establecimientos, 50.9 por ciento son comercios, 35.5 por ciento servicios, 11.8 por ciento manufactura y 1.8 por ciento el resto de las actividades económicas.

El 97.19 por ciento son micro empresas de uno a 10 personas que no han tenido hoy el apoyo y ocupan al 64.85 por ciento del personal formal de la entidad, 2.7 son Pymes de 11 a 250 personas que dan empleo al 27.28 por ciento del total, el 0.4 por ciento son grandes y dan empleo al 7.87 por ciento del personal ocupado.

La informalidad representa el 73.7 del total de los comercios, la disparidad es grande entre los que pagan impuestos y los que no lo hacen, mientras que en junio de este año se reportaron 219 mil 852 empleos formales, pero en junio del 2016 se reportaron 219 mil 889, lo que implica que no hemos tenido crecimiento.

El Tratado México, Estados Unidos y Canadá no genera un fuerte impacto en nuestra economía, vemos un panorama complicado y requiere un pacto económico y social renovado para salir adelante, los 25 mil pesos que ofreció la federación por crédito a la palabra no han sido suficientes, se requiere un plan integral, apuntó.