Un grupo de pequeños empresarios y comerciantes establecidos en el Centro de la ciudad ha sido víctima de robo de mercancía, en pago de servicios y fraude por sujetos que usan cheques de instituciones de gobierno estatal, de personas a las que se los han robado y en algunos casos falsos.

La vendedora de ámbar, María de la Luz González explicó, a nombre de los afectados, que los delincuentes operan principalmente en los negocios establecidos fuera del primer cuadro de la ciudad, de preferencia ubicados en la zona poniente y calles aledañas donde la vigilancia es escasa y están al amparo de la noche.

Señaló que son al menos tres hombres, encabezados por un “adulto mayor” y los otros son de entre 35 y 45 años de edad, mismos que ingresan a los establecimientos y envuelven a los encargados con el pretexto de hacer compras grandes de mercancía en su caso ámbar y en otros han sido alimentos típicos, ropa y artesanías. Los montos de los cheques reportados, por citar algunos son: 6 mil 228 pesos, 12 mil 445 pesos y 22 mil 100 pesos.

“Engatusan bien a los trabajadores, incluso los mismos dueños no nos damos cuenta que es robo o fraude y estos tipos adquieren tranquilamente servicios y pagan con cheques falsos”, expresó.

“COMIDA DE REYES”

Mencionó que recientemente estos individuos acudieron a un negocio de comida y bajo el argumento de organizar una cena para 150 invitados, solicitaron pruebas de los platillos del restaurante ubicado en una zona del poniente, donde “comieron y bebieron como reyes” luego fingieron hablar por teléfono con la responsable de una supuesta institución de gobierno para cerrar el trato.

Después, dieron un cheque apócrifo de una institución cultural con el que dieron un adelanto de 35 mil pesos por el banquete y el resto se cubriría antes de la cena del 24 de diciembre de 2018.

Los inconformes dijeron que este grupo ha actuado de este mismo modo desde hace varios meses y a pesar de las denuncias hechas en las instancias correspondientes, no ha sido detenido; sin embargo, el número de personas esquilmadas crece porque no todas están enteradas de esta modalidad de robo y fraude.

A esto se añade que no todos quieren denunciar ante la Fiscalía General del Estado por vergüenza a que los “hayan chamaqueado” y en consecuencia haber perdido su mercancía.

Por ello exhortan a todos los comerciantes a estar atentos y no dejarse sorprender pero en caso de ser visitados por estos “amantes de los ajeno”, les recomiendan entretenerlos mientras llaman a la Policía para que sean encarcelados en “El Amate” en el municipio de Cintalapa.