El flujo migratorio en la frontera sur está presentando fenómenos atípicos o circunstancias que no se habían presentado en las caravanas del año pasado; el Instituto Nacional de Migración (INM) pasó de ser una institución policiaca, a un organismo administrativo, gestor y de atención a los migrantes, dijo el presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), Juan José Zepeda Bermúdez.
En octubre del año pasado con la presencia de las caravanas “nos tocó ser interlocutor por la presencia policial, tuvimos que negociar el paso de los migrantes, ahora en vez de mandar a policías enviaron personal administrativo para hacer los trámites, recibir la solicitud y documentación de visa humanitaria, y al día de hoy han recibido más de doce mil 500 solicitudes”, apuntó en entrevista.
NUEVOS ESCENARIOS
De acuerdo con Zepeda, estamos viendo una situación de atención totalmente diferente por parte del INM, el año pasado sorprendió que eran siete mil migrantes, mientras que ahora suman más de 12 mil 500, de los cuales más de 2 mil 500 han recibido la visa humanitaria.
“Habrá que ser muy cuidadosos y respetuosos de los derechos humanos de los migrantes y de los mexicanos, estamos viendo escenarios que no se veían, con esta regularización se han podido encontrar a personas que estaban siendo buscadas por homicidio en su país”, expuso.
Zepeda Bermúdez precisó que esta política de apertura del INM en la frontera sur para el registro de los migrantes, no han ingresado personas que cuentan con antecedentes penales, esto ha sido un avance muy importante, valoramos la atención que se genera en Chiapas por parte de la federación.
Asimismo, reconoció la aportación de la sociedad civil y de las iglesias en la atención a los migrantes; “recibir a una caravana multitudinaria en un pueblo chico como Suchiate es un reto, se han ido acompañando a los grupos de ese lugar a Tapachula con su visa humanitaria, además, los gobiernos federal y estatal ofrecen un programa emergente de empleo a quienes así lo acepten”, dijo.