La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) no descartó que en Chiapas, y en particular en Tuxtla Gutiérrez, se hayan cometido fraudes financieros a ciudadanos que buscan contratar un crédito.
Lo anterior debido a la recurrente práctica de suplantar la identidad de entidades financieras para defraudar a las personas que buscan un crédito, por ello ha emitido una alerta a la población sobre la existencia de empresas que se ostentan como entidades financieras, las cuales ofertan supuestos créditos a cambio de cierta cantidad de dinero, que los interesados deben pagar de manera anticipada por concepto de comisiones por apertura y/o pagar una fianza.
La institución señaló que en estos casos, las víctimas han pagado y perdido cantidades que van de los 10 mil hasta los cien mil pesos, por ello han tenido que recurrir ante el Ministerio Público a interponer la denuncia correspondiente.
Asimismo, dio a conocer que se han detectado en las últimas semanas, 22 Sociedades Financieras de Objeto Múltiple, Entidades No Reguladas (Sofom, E.N.R.) que están debidamente inscritas en el Registro de Prestadores de Servicios Financieros de la Condusef, y que denunciaron el uso fraudulento y suplantación de su nombre comercial e incluso algunos de sus datos fiscales o administrativos.
Precisó que el “modus operandi” de las empresas falsas usualmente es el siguiente: Utilizan información como razón social, direcciones, teléfonos e imagen corporativa (logotipos) de las entidades financieras debidamente registradas y supervisadas, para hacerse pasar por ellas.
Ofertan créditos inmediatos y con pocos requisitos, pero solicitan anticipos de dinero con la finalidad de apartar el crédito, gestionarlo o pagar gastos por apertura o como fianza en garantía, generalmente el equivalente al 10% del monto total.
Los usuarios han denunciado que personas que “laboran” en las compañías falsas, los contactan vía telefónica haciéndose pasar por promotores de la entidad financiera, ofreciéndoles créditos con mensualidad de montos pequeños para hacerlos atractivos; sin embargo, cuando no reciben el crédito y ya pagaron los gastos exigidos, ya no pueden localizar a quien los contactó.
Utilizan domicilios falsos, solicitan a los usuarios enviar su información personal vía WhatsApp o por mensajes de Facebook, poniendo en riesgo los datos personales.
Cuando los usuarios hacen los depósitos en la cuenta bancaria o en alguna tienda de conveniencia, para obtener el supuesto crédito y se quieren poner en contacto con la empresa, no lo logran, entonces recurren a la Condusef para verificar su existencia y es cuando se enteran que han sido víctimas de un fraude mediante la suplantación de una entidad financiera.
Por ello, la recomendación de la dependencia es verificar los datos y contactar a la compañía, si realmente existe, además no confiar en las redes sociales porque estas empresas generalmente operan vía WhatsApp y Facebook.