Concluyen las visitas de las virgencitas de Copoya en hogares de Tuxtla Gutiérrez, en un recorrido tradicional organizado por la mayordomía Zoque que ha congregado a multitudes en diferentes colonias de la capital de Chiapas desde el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
En la casa de los señores Adolfo Cuevas de la Cruz y Rosalía de la Cruz, en la colonia Fovissste Paraíso, se veneran a la virgen de Candelaria, del Rosario y Olaechea María, además de la virgen de Los Dolores y la virgen de Espera, así como el niño Salvador del Mundo.
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Durante las visitas, los hogares son bien recibidos por la gente creyente y devota, quienes ofrecen bocadillos y pozole de cacao, además de quemar cohetes y adornar el altar con flores. También se colocan panes sin levaduras, rosquillas y piñas, mientras que la base del somé se adorna con hoja de pescado y flores de coyol, y se encienden velas y veladoras.
La señora Rosalía de la Cruz Aquino compartió su gozo y alegría por la visita de las imágenes a su hogar, donde se les dio la bienvenida el 2 de febrero al bajar de Copoya y se les despedirá para subir a su nicho. Durante la semana se sirvió mole con pollo y caldo de res a los visitantes, y el domingo se servirá desayuno a los priostes antes de preparar las imágenes en sus cajitas o baúles de madera para su regreso a Copoya.
El recorrido de regreso a Copoya el domingo se acompañará con danzas, incluyendo la de la pluma roja de guacamaya, los para chicos y las viajas, que son hombres vestidos de mujeres, lo que promete ser una algarabía alrededor de esta tradición que se lleva realizando desde hace 69 años, según comentaron los priostes.
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