La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) ha establecido 19 brigadas en 14 municipios de la entidad para la prevención de incendios en Áreas Naturales Protegidas (ANP), que suman en el estado un millón 300 mil hectáreas de diversas categorías.
Con las comunidades asentadas al interior de las ANP se realizan labores de prevención tanto físicas como de difusión, para reducir y evitar la presencia de incendios forestales en los ecosistemas sujetos a conservación y sus zonas de influencia.
Si la brigada comunitaria no cuenta con la capacitación correspondiente para atender la contingencia de incendio forestal que se presente, en esta fase se lleva a cabo el proceso de formación de capacidades técnicas que permita a los brigadistas realizar acciones seguras y efectivas en la prevención y atención a la contingencia desde la dirección Regional Frontera Sur, Istmo y Pacífico Sur.
Te puede interesar: Piden nuevos estudios geológicos al Cañón del Sumidero
Por otra parte, se atiende contingencias, es decir, la ejecución de acciones y operativos necesarios para enfrentar el desarrollo o presencia de incendios forestales en las Áreas Naturales Protegidas y sus zonas de influencia, así como el establecimiento de rutas de escape y el levantamiento de información sobre sitios y superficies afectadas.
Por otra parte, se impulsa la restauración y rehabilitación que favorezcan la recuperación y el restablecimiento de las condiciones propicias para la continuidad de los procesos naturales en los ecosistemas que hayan sido afectados por algún incendio forestal en el Área Natural Protegida y su zona de influencia.
La atención se concentra en todas las ANP, las más grandes son la Reserva de la Biosfera Montes Azules, La Encrucijada, La Sepultura, El Ocote, El Triunfo, el Parque Nacional Cañón del Sumidero y el Parque Nacional Lagos de Montebello, entre otras de orden federal, que administra la CONANP.
La importancia de la prevención de incendios radica en la conservación de la flora y la fauna silvestre, algunas especies amenazadas, que requieren especial atención a partir de sus ecosistemas, que contribuya a la regeneración nacional y adquiera capacidad de sobreponerse a algún siniestro.
Durante el 2019 las Áreas Naturales Protegidas recibieron la visita de más de 300 mil personas, quienes recibieron información de los ecosistemas, los procesos de educación a las comunidades, los sistemas de producción amigables al medio ambiente y la recreación de paisajes.
/AP