Dentro de la sociedad existen temas sumamente complejos en los cuales algunos son o no son aceptados por la sociedad, si bien sabemos que cada persona tiene una manera de pensar en la cual probablemente son muy similares a la de alguien más o no y son estos son los que nos marcan como sociedad entre diferencias y similitudes.
La revista proceso documentó el 26 de abril de 2007 que la Fiscalía General del Estado llamaría a comparecer al exgobernador en el marco del procedimiento de investigación que se le iniciara a su ex jefe de policía, Ignacio Flores Montiel, quien estaba también siendo investigado por la muerte de los periodistas Humberto Gallegos Sobrino (1989), Alfredo Córdoba Solórzano (1990) y Roberto Mancilla Herrera (1993), así como también de 15 personas disidentes sexuales acribillados a tiros. Sin embargo, dicha comparecencia nunca se efectúo.
En ese mismo año la Asociación de Periodistas y Comunicadores de Chiapas A.C se pronunció al respecto de los tres periodistas fallecidos, en en un comunicado mencionan «sus lamentables muertes son el más doloroso recuerdo de la época de represión y persecusiones contra el periodismo crítico de aquel régimen gubernamental».
Las Organizaciones mencionaron que los crímenes y violaciones a los derechos humanos cometidos en el gobierno de González Garrido durante la gobernatura del 8 de diciembre al 4 de enero de 1993 aún están frescos en la memoria de las víctimas sobrevivientes y sus familias.
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La comunidad LGBTI siempre ha presentados distintos problemas de discriminación y desigualdad en la sociedad, en Agosto del 2018 las Organizaciones defensoras de los Derechos Humanos de la población Lésbica, Gay, Bisexual, Transexual e Intersexual (LGBTI) en Chiapas expresó en un comunicado, su indignación al reconocimiento que se le otorgó al ex gobernador Patrocinio González Garrido por el Congreso del Estado.
Las organizaciones Unidos Diferentes A.C, Una Mano Amiga en la Lucha contra el SIDA A.C, Capítulo IV todo sobre lesbianas, Diana Sacayán A.C, Grupo SE-TU, Colectivo Red Abierta, Dvenires: Instituto de Intervención Psicosocial, Comunidad en Acción Contra la Violencia y la Red por la Inclusión de la Diversidad Sexual en Chiapas, expresaron su repudio al otorgarle de manos del gobernador Manuel Velasco Coello la “Medalla Miguel Álvarez del Toro” a González Garrido.
En el comunicado, afirman que Amnistía Internacional vincula directamente al exgobernador chiapaneco con el asesinato de al menos 15 personas homosexuales y tres periodistas en la entidad durante la década de los noventas.
El 17 de Noviembre del 2021, organizaciones defensoras de los derechos humanos de la población Lésbica, Gay, Bisexual, Transexual, Travesti, Transgénero e Intersexual y más (LGBTTTI+) se manifestaron frente a la presidencia municipal de Tuxtla Gutiérrez, en un acto de repudio y protesta contra el ex gobernador Patrocinio González Garrido, quien fue reconocido con la medalla en honor al mérito ciudadano “Joaquín Miguel Gutiérrez”.
La integrante de la Asociación Capitulo IV, María Teresa Campos manifestó que el reconocimiento a Patrocinio González, a uno de los autores de crímenes de odio en contra de las personas LGBTTTI+, periodistas, activistas y líderes, lleva sangre, porque durante su gobierno se ordenaron los asesinatos de hombres gays y mujeres trans, quedando marcada con rojo escarlata la historia de Chiapas.
Recordó que en ese gobierno de sangre entre 1990 y 1993 de Patrocinio González Garrido, diversas organizaciones nacionales e internacionales como Amnistía Internacional y Fray Bartolomé de las Casas, documentaron graves violaciones a los derechos humanos en contra de periodistas, líderes de los derechos humanos, mujeres trans y hombres gays.
Ante dicha situación de violencia y sangre en 1993, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió la recomendación 113/93 por las continuas ejecuciones extrajudiciales, así como detenciones arbitrarias e irregulares procesales donde la complicidad directa de las autoridades fue el denominador común.
Y en ese momento del año pasado consideró como reconocimiento a la impunidad porque los asesinatos ordenados desde la cúpula del Ejecutivo estatal, a cargo de Patrocinio González Garrido, entre 1990 y 1993, no tuvieron consecuencias legales, dichas acciones no fueron castigadas, por el contrario, hoy se premian y aplauden con dicha medalla.
Manifestó que esa medalla no la merecía porque va en contra del valor que se le ha dado, reverencia a la injusticia y desprecia a las voces de familias que durante muchos años han exigido justicia por el asesinato de sus hijos, hijas, hermanos y hermanas que fueron asesinados en su sexenio.