En la temporada de estiaje, es común que los manatíes se encuentren confinados en cuerpos de agua con temperaturas adecuadas y profundidad suficiente, pero sin acceso a zonas de alimentación. Ante esta situación, la colaboración entre la población local y las autoridades ambientales cobra vital importancia para garantizar el bienestar de estos ejemplares.
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El personal de la Dirección de Áreas Naturales y Vida Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (SEMAHN), en conjunto con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), ha implementado una serie de acciones para monitorear y proporcionar alimentación a los manatíes varados.
En muchas ocasiones, son los propios habitantes de la zona quienes reportan la presencia de manatíes varados, lo que permite una pronta intervención por parte de las autoridades. Una vez recibido el aviso, el personal especializado realiza recorridos en las áreas afectadas para evaluar la situación de los ejemplares y proporcionarles la ayuda necesaria.
Este proceso de rescate y cuidado de los manatíes varados incluye la participación de médicos veterinarios especializados, quienes determinan la variedad de vegetación nativa más adecuada para su alimentación. Se evita proporcionarles otros alimentos que podrían ocasionar problemas graves de salud a largo plazo.
Además, se toman medidas preventivas para evitar la manipulación inadecuada de los alimentos y prevenir la transmisión de enfermedades zoonóticas entre los ejemplares y el personal encargado de su cuidado.
Gracias a estas acciones coordinadas entre la comunidad local y las autoridades ambientales, se busca garantizar la protección y conservación de los manatíes, con