En las gradas del Monumento a la Bandera en el Parque Bicentenario de Tuxtla Gutiérrez se realiza el montaje de lo que será el Mega Altar Bicentenario, el más grande de Chiapas, para conmemorar el Día de Todos los Santos y Fieles Difuntos el 1 y 2 de noviembre. Los trabajos están a cargo del maestro de arte y cultura Omar Cruz Delgado.
En entrevista, explica que esta será la tercera edición y medirá aproximadamente 800 metros cuadrados. El altar representará a todo Chiapas y a todos los tuxtlecos. Para su elaboración, cuenta con el respaldo de patrocinadores que proporcionan flores, frutas, veladoras, flor de nulibé, musá o cempoazuchil. Además, se colocarán fotografías de personajes destacados de Chiapas.
El montaje incluye imágenes de calaveras, flor costurada y papel picado con la leyenda "Día de Muertos más vivo que nunca". Desde la parte más alta, se han colocado tiras de papel picado que caen hacia tres grandes cruces, teniendo en el centro una imagen de la calavera. Para iluminar la representación de las tumbas, se utilizan faroles compuestos por veladoras y jicalpestes de plástico forrados con papel de colores.
La primera edición se realizó en este lugar, mientras que la segunda tuvo lugar en la calzada de las personas ilustres. Esta tercera edición regresa a las gradas del Monumento a la Bandera. El maestro Omar Cruz señala que en esta ocasión no se colocará comida. La invitación al público es a maravillarse con la imaginación, ya que habrá cien fotos de personajes ilustres de Chiapas.
Entre los personajes destacados estarán Emilio Rabasa, Rodolfo Figueroa, Jaime Sabines, Juan Sabines, Lola Montoya, la doctora Carlota Fernández, y las panaderas Álvarez del barrio San Francisco. También se han colocado las fotos de los abuelos recién fallecidos de algunos colaboradores. Es una mescolanza que incluye cruces que representan las tumbas, el camposanto, el joyonaqué, el pan, las catrinas y el Dios maya que ofrendaba a los difuntos, así como alebrijes y calaveras.
Se suman colaboradores de Mezcalapa, Tecpatán y Jiquipilas en esta elaboración. El altar es un homenaje a los muertos, creado por el pueblo y para el pueblo. El maestro Cruz comparte que, en las cruces, hay personas que él conoce, como el empresario Felipe Grabada Rodríguez y el dirigente campesino de Chiapas, Eloy Morales Espinosa.
Entre los recuerdos que ha colocado, destaca la fotografía de doña Carmelita Primera, quien siempre le contaba parte de su historia. Uno de sus sueños fue integrar una escolta, lo que logró en su vejez; también quiso bailar chiapaneca, y ese deseo se cumplió. Su petición a Dios de ser Reina del Carnaval se hizo realidad el 21 de febrero de 2022, y falleció el 21 de marzo de ese mismo año, siendo enterrada con su corona.
En el primer altar en el mismo sitio se usaron cónicas, esferas con veladoras y cruces; en el segundo año, en la calzada de las personas ilustres, se emplearon ramilletes hechos de papel y aserrín. Para esta tercera edición se realizará una mezcla de ambos, simulando un cementerio, con la inclusión de alebrijes y personajes ilustres.
