El colectivo "Menos Puentes Más Ciudad" ha levantado su voz en defensa de los recursos naturales de Tuxtla Gutiérrez, argumentando que protegerlos no es irresponsable. En los parques urbanos Tuchtlán, Joyyo Mayu y Caña Hueca, habitan 149 especies de aves que se verían afectadas por la construcción del Circuito Interior Chiapas de Corazón.
El colectivo asegura que el amparo es un derecho humano para reclamar derechos negados, y previo a la presentación del amparo, se realizaron ocho solicitudes de diálogo que no han sido atendidas por la Secretaría de Obras Públicas y el ayuntamiento de la capital. Además, se han rechazado 45 solicitudes de información.
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El representante del colectivo, el maestro Joseliny Omar Díaz Torres, señala que consideran irresponsable proponer una obra de gran impacto sin contar con estudios técnicos adecuados, especialmente considerando que su costo asciende a 2 mil 300 millones de pesos, una cifra equivalente al presupuesto anual de la capital de Chiapas. Además, critican que el segundo piso planteado por la Secretaría de Obras Públicas solo beneficiaría al 90 por ciento de la población que utiliza autos particulares, mientras que el 98 por ciento restante exige una modernización del transporte público.
En el área de impacto, que incluye el boulevard Manuel Velasco Suárez, prolongación Caña Hueca, Reloj Floral, Quinta Norte y Los Laguitos, existen aproximadamente mil 300 comercios que se verían afectados durante el proceso de construcción del segundo piso. Hasta el momento, no se les ha informado sobre el impacto que la obra tendrá una vez que esté en funcionamiento.
Por estas razones, el colectivo "Menos Puentes Más Ciudad" considera que deben existir alternativas y han recurrido al amparo como último recurso para exigirlas. Afirman que el amparo es un derecho humano y un mecanismo de defensa de derechos fundamentales reconocido en la Constitución. Los amparos presentados hasta ahora han sido en contra de la autorización del derribo de 485 árboles en las vialidades de impacto, así como del trasplante de 582 árboles que actualmente brindan servicios ecosistémicos.
Díaz Torres confirmó que la Secretaría del Medio Ambiente e Historia Natural, encabezada por la arquitecta María del Rosario Bonifaz Alfonso, autorizó el manifiesto de impacto ambiental de carácter estatal para las vialidades el 12 de mayo, pero el colectivo solo recibió un resumen del mismo.
Se han identificado inconsistencias y omisiones en relación a las especies de fauna, lo cual implica que no se puede iniciar la obra. Ante una eventual licitación de la obra, el colectivo también impugnará el documento ante un juez federal, argumentando que contiene información tendenciosa y falsa, incluyendo datos inflados sobre el flujo vehicular. Según el colectivo, la única forma en que la Secretaría de Obras Públicas pudo obtener la aprobación del manifiesto de impacto ambiental es a través de mentiras.