Tuxtla Gutiérrez.- Chiapas necesita una nueva Ley de Aguas que responda a las necesidades de abasto, saneamiento de las aguas residuales, protección de las cuencas hidrológicas, restauración de ecosistemas, eliminación de la basura y protección de los ríos, expuso la diputada María Elena Villatoro Culebro.
Desde la legislatura pasada la diputada del partido Chiapas Unido planteó una reforma legal pero no prosperó a pesar de que hubo consenso con organizaciones ambientalistas e instituciones públicas, privadas y universidades, sin embargo, considera que es momento propicio para lograr el producto acabado.
Reconoció que el estado con gran potencial hídrico tiene serios problemas, que de no atenderse ponen en riesgo la sustentabilidad del agua, uno de ellos es la pérdida acelerada de la cubierta forestal, que debe atenderse, el deterioro y contaminación de las cuencas, la sobre explotación de los acuíferos, los efectos de las sequías y el cambio climático.
Ante ello plantea adoptar el término Gobernanza del Agua en su justa dimensión, porque de los 5.5 millones de chiapanecos, aproximadamente el 80 por ciento tiene abasto de agua aun racionalizado en muchas partes, el resto tiene problemas para obtener el recurso natural, sin embargo, un gran problema es la contaminación, debido a que no tenemos infraestructura para sanear las aguas.
Requerimos, expuso, desde la planeación integral hasta la implementación y evaluación de acciones e involucrar a la sociedad en la toma de decisiones, se trata de realizar una buena gestión del agua con una gran participación social, que construya soluciones viables.
Tenemos que reconocer a la cuenca como un gran territorio ideal para gestionar el agua, desde donde cuidemos el agua, suelo, flora, fauna y otros elementos relacionados con el medio ambiente, como la planificación y programación de recursos biofísicos, sociales, económicos y administrativos, porque solo si hay agua habrá mejor calidad de vida para la humanidad en el futuro.
Villatoro Culebro participó en la mesa de “Gobernanza del Agua” en la secretaría General de Gobierno, donde planteó la importancia de una nueva legislación al respecto, pues el proyecto diseñado es una nueva visión normativa, social y humana retomando elementos fundamentales como el derecho humano al agua y saneamiento, enmarcados en los 17 objetivos de desarrollo sostenible de la Organización de las Naciones Unidas.