En los tres primeros meses de este año 2023 las tasas más altas de informalidad laboral fueron en Oaxaca, con el 80 por ciento; Guerrero, con el 79.3 por ciento y Chiapas con el 73.9 por ciento, en Tuxtla Gutiérrez los empleos informales que proliferan son la venta de equipo la telefonía celular, que tienen un costo aproximado de 200 pesos menos que en tiendas formales.
Don José Gómez Morales, se dedica a esta actividad desde hace cuatro años, debido a que ya no pudo continuar en la industria de la construcción donde alguna vez contó con seguridad social, por problemas de salud que le impidieron cargar gran volumen de peso, desde Chiapa de Corzo se desplaza todos los días para recorrer las calles y parques de la capital de Chiapas.
Desde el municipio de Chamula en la región Altos migró a Tuxtla Gutiérrez un grupo de niñas, adolescentes y jóvenes que se dedican a la producción y venta de textiles, blusas para damas, camisas para caballeros, rebozos, bolsas para dalas, monederos, sombreros, mochila, algunos productos las elaboran de manera artesanal, otros productos por compran la hechos para su comercialización.
Mientras ellas se acompañan para vender sus mercancías, en otro punto de la plaza hay adolescentes vendiendo raspados, asadores de calzados que se mueven de un punto a otro, hay quienes también se dedican a la venta de dulces, chicles y cigarros en las plazas.
Don Pedro Vázquez Gómez dejo su natal Ocosingo para vender en las plazas raspados y chamoyadas, antes de dedicaba a la agricultura, pero por su edad se decidió buscar trabajo en la capital de Chiapas, desde hace seis años incursionó en la economía informal.
Desde hace 16 años se ubica en la calle central y primera sur en la venta de dulces, frutas de la época, tiene permiso del ayuntamiento, de ese punto no se puede mover a otro lugar, dona María del Carmen Nucamendi Román, espera que la población le siga comprando para sostener a su familia.
En el parque La Libertad se encuentra Doña Mariela, una mujer que incursionó en bolear o asear calzado, desde hace 14 años, se dedica a esta actividad tras fallecer su esposo, le acompañan dos familiares mujeres, una de sus hermanas que acaba de fallecer llevaba 38 años en la actividad, se siente a gusto compitiendo con varones, cambia colores, costura zapatos y huaraches, también pinta mochilas y chamarras de piel.
En las calles de Tuxtla Gutiérrez también se encuentran comerciantes vendiendo prendas de vestir para damas, caballeros y niños, pero también se encuentran comerciantes que veden frutas y verduras de la región en las calles alrededor de los mercados públicos municipales, tiene clientes cautivos, administra sus ingresos, trabaja de lunes a sábado, el domingo se la pasa con su familia.
No han censo en Tuxtla Gutiérrez del número de comerciantes informales, ni por parte de los mismos ambulantes, ni por parte del ayuntamiento o de la Cámara Nacional de Comercios, Servicios y Turismo, lo cierto es que la informalidad crece.
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