El Programa de Apoyo a la Educación Indígena que efectúa el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) consiste en garantizar la permanencia en la educación de niños y jóvenes, inscritos en escuelas públicas.
El INPI da prioridad a aquellos que no tienen opciones educativas en su comunidad, por ello vela por brindar hospedaje a los beneficiarios que lo requieran, a través de las Casas del Niño Indígena, siempre y cuando existan las condiciones de habitabilidad, equipamiento y uso adecuado.
Además, otorga alimentación y artículos de higiene personal, mientras que los comedores del niño indígena contribuyen al sano crecimiento y desarrollo.
Estas acciones obedecen a brindar oportunidad a alumnos indígenas que estén integrados en espacios operados por instancias estatales, municipales y organizaciones de la sociedad civil, que tengan como función promover o facilitar la permanencia en la escuela.
Actualmente, 11 mil 132 infantes están albergados en 145 casas donde conviven de lunes a viernes, para regresar los fines de semana a sus viviendas.
En San Cristóbal de Las Casas y Ocosingo se localizan 33 albergues y son atendidos alrededor de dos mil pequeños; es donde se concentra el mayor número de beneficiarios; en tanto, los municipios de Tila, Mazapa, Palenque e Ixtacomitán suman 44 casas en beneficio de más de tres mil niños.