San Cristóbal de las Casas, Chiapas - Carlos de la Cruz, un talentoso artista plástico originario de Zinacantán, miembro del grupo lingüístico tsotsil, se ha destacado durante más de una década por su habilidad para llevar la riqueza textil y la sabiduría de los pueblos originarios a las artes plásticas. A sus 33 años, ha emprendido un viaje artístico que honra sus raíces y sus sentimientos a través del óleo sobre textil.
El próximo 23 de septiembre, Carlos de la Cruz presentará su exposición titulada "Orígenes" en Casa Raíz, ubicada en San Cristóbal de las Casas. Esta exhibición es el resultado de años de trabajo en óleo sobre el telar de cintura, en el que busca fusionar el textil con el arte plástico, un proyecto que nace de su profundo deseo de regresar a sus raíces y promover el textil en el ámbito de las artes visuales.
Carlos, quien también es profesor de educación primaria, recuerda su amor por las artes desde su infancia. Hace once años, decidió dedicarse profesionalmente al arte y ha experimentado con diversas técnicas, incluyendo acrílico, acuarela, bolígrafo, carboncillo y óleo. En su próxima exposición, mostrará dos tipos de textiles especialmente significativos: el "mochebal," utilizado por las mujeres, y el textil para las naguas.
El artista explica que eligió estas piezas porque son cómodas y prácticas para fusionar con el arte, y son elementos muy representativos en el traje tradicional de las mujeres de Zinacantán. Los coloridos diseños de flores son un emblema del municipio y un ícono cultural que desea destacar en su obra.
La elección del textil como medio artístico es una manera para Carlos de regresar a lo que representa su pueblo originario. Considera que lo que diferencia su obra de otras técnicas y culturas es precisamente esta temática, que se refleja en el título de su exposición. La familia de Carlos ha mantenido viva la tradición del textil en su comunidad, y él busca compartir la lengua, la cultura y la cosmovisión de su pueblo no solo en Chiapas, sino también en estados como Oaxaca, Ciudad de México, Puebla y más allá.
Carlos de la Cruz subraya que el arte trasciende la mera representación y lleva consigo la sabiduría y la emoción de quienes crean el textil. Para él, el arte es una forma de preservar y difundir las tradiciones culturales, y lamenta la falta de apoyo de las instituciones públicas en este sentido. Además, destaca la importancia de valorar la vestimenta, la lengua y las tradiciones de los pueblos originarios, especialmente entre las generaciones más jóvenes.
Uno de los desafíos que enfrenta Carlos es que su obra a menudo es más apreciada por el público fuera de su comunidad que por los locales, quienes consumen arte con menos frecuencia. A pesar de estos obstáculos, su labor como docente de primaria lo impulsa a educar a los niños sobre el arte, las culturas, las tradiciones y los textiles, al tiempo que busca concientizar sobre la importancia del medio ambiente y la preservación de la belleza natural en sus obras.
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Carlos de la Cruz es un ejemplo inspirador de cómo el arte puede servir como un puente entre las tradiciones ancestrales y el mundo contemporáneo, llevando consigo la riqueza cultural de su pueblo a través de su talento artístico único. Su exposición "Orígenes" promete ser una oportunidad para explorar y apreciar la fusión única de textil y óleo que refleja la esencia misma de los Altos de Chiapas.