Tuxtla Gutiérrez.- La organización Cáritas de Tuxtla Gutiérrez realiza una recolecta de víveres para apoyar a las familias desplazadas que han buscado refugio en la capital chiapaneca, según señaló el padre Gilberto Hernández García, director de Cáritas en Tuxtla Gutiérrez y asesor diocesano de la Pastoral Social.
El padre señaló que luego del éxodo de habitantes de Chicomuselo hacia otras partes de la entidad, se enteraron que algunas familias se habían asentado en la capital chiapaneca, por lo que solicitaron el apoyo de la ciudadanía para realizar una recolecta de alimentos y esta fuese donada a dichas familias.
"Desde hace unas semanas hemos tenido noticias de varias familias que están aquí en Tuxtla, distribuidas en varios rumbos de la ciudad. Estas personas han tenido que huir de los municipios, particularmente de Chicomuselo y algunos cercanos a La Concordia, debido a la violencia. Algunos han sido afectados de manera directa, otros de manera indirecta, y decidieron venir a Tuxtla, ya sea porque tienen familiares aquí o porque creen que estarán más seguros." Dijo el padre.
Alrededor de 18 familias, dando un total de aproximadamente 120 personas, han sido beneficiadas con estas acciones realizadas por la iglesia católica, con el apoyo de la ciudadanía. Entre ellos hay una gran cantidad de niños y niñas menores de 15 años y adolescentes en edad escolar que han perdido su año académico o están en proceso de hacerlo.
"Por lo general, las despensas que entregamos son de alrededor de 8 kg. Hemos hecho un par de entregas a casi todas las familias y seguimos solicitando a la población que contribuya, ya sea llevando alimentos a las parroquias de San José Terán, San Pedro y San Pablo, Divino Niño, Nuestra Señora del Sagrado Corazón o directamente a nuestras oficinas centrales junto a la parroquia de San Roque," añadió.
Cáritas, junto con las parroquias locales, ha estado en contacto con estas familias desplazadas, proporcionando apoyo. Los principales víveres recolectados incluyen granos como maíz, frijol y arroz, además de enlatados y otros productos no perecederos que pueden almacenarse por más tiempo.
"Hay grupos de familias en diversos lugares de la ciudad, en el sur oriente, sur poniente y el norte. Las parroquias cercanas a estas áreas han estado ayudando a identificar sus necesidades y proporcionar apoyo. Lo que las parroquias no pueden cubrir, lo hacemos nosotros con despensas, ropa, cobijas y medicamentos," explicó el padre Hernández.
Así también, el sacerdote mencionó que quienes quieran sumarse a este proyecto para apoyar a las familias pueden hacerlo, priorizando el llamado a médicos, enfermeras, psicólogos y tanatólogos para brindarles atención médico a dichas familias. Señaló qué para sumarse lo pueden hacer acercándose a las Parroquias previamente mencionadas.
El padre también hizo un llamado a la comunidad para donar alimentos y agua, ya que en este momento tienen suficiente ropa y están depurando lo que ya han recibido. Además, señaló que las contribuciones económicas también son valiosas, ya que ayudan a cubrir necesidades específicas como los traslados para tratamientos médicos.
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"Hay algunos enfermos que necesitan ser trasladados a lugares como la Ciudad de México para recibir atención médica. Las donaciones económicas nos permiten apoyar en estos casos," concluyó.
Por último enfatizó en qué estas familias también están recibiendo apoyo moral y espiritual, con el fin de qué se puedan recuperar de los hechos violentos a los que fueron sometidos y les ha impactado negativamente en su salud mental.
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