Las escuelas en Tuxtla Gutiérrez reactivaron nuevamente sus clases presenciales y aunque a algunos les costó un poco más, ahora ya están viviendo su semana de exámenes antes de salir a las vacaciones de Semana Santa.
El Heraldo de Chiapas platicó con algunos profesores quienes compartieron sus experiencias y coincidieron en su mayoría que el regreso fue de lo más difícil a tal grado de llegar a ser caótico, pero que fue necesario tanto para los estudiantes, así como para los catedráticos quienes ya están adaptados a este regreso.
Uno de los retornos más complicados fue la educación primaria y kínder, pues al ser estos los más jóvenes hay algunos que todavía no cuentan con vacunas según comentan, por lo cual estar nuevamente en un espacio cerrado fue muy difícil de plantearse, sin embargo, de igual forma ya se dio el comienzo en las escuelas privadas quienes fueron los primeros en dar este importante paso.
Platicamos con la profesora Alejandra, quien contó su experiencia en este retorno a clases y admitió que fue muy complicado porque los más pequeños son los que menos preocupados están, los que menos temen contagiarse a tal grado que algunos han llegado enfermos a las aulas.
También puedes leer: Clases presenciales mejoran rendimiento escolar: Docentes
“Regresar fue caótico pero necesario, estar en un salón con niños era peligroso pero la educación en línea es más difícil, los niños necesitan estar en la escuela, es muy distinto tenerlos en línea que tenerlos de frente, ahora solo hay que cuidarse” comentó.
Por otro lado; a nivel medio superior las cosas han sido más tranquilas y es que los jóvenes al no tener permisos de sus padres de salir sino son con ellos, no podían hacer mucho en las mañana por lo cual, Carlos Manríquez, maestro de dicho sector afirmó que el regreso a clases fue positivo y que ha sido más tranquilo de lo que creen, aunque volver tuvo sus problemas, están satisfechos con lo conseguido.
Sobre el nivel de las preparatorias, este ha sido el que más problemas ha presentado y es que las prepas fueron de las últimas en regresar, por lo cual, volver de golpe les causó un poco de estrés, según comenta el profesor Jonatan Yair quien a pesar de estar contento no olvida que el volver ha sido un caos para el y para el resto de sus compañeros quienes ya están otra vez metidos de llenos pues ahora hay que pensar en los exámenes.
“La situación nos agarró desprevenidos a todos, estuvieron avisando que esta semana que si la otra y nosotros no podíamos dejar de preparar nuestras clases por lo cual, cuando llegó el anuncio oficial nos espantó a todos, sabíamos que iba a ser complicado pero entendíamos que era lo que los jóvenes necesitaban, ahora hay que concentrarse más porque se vienen los exámenes y tenemos que estar atentos” comentó.
En cuanto a la universidad, quizá fueron los que más tranquilos estuvieron y es que las clases regresaron a la normalidad desde hace muchísimo tiempo por lo cual, a estas alturas ya se encuentran más tranquilos, sin embargo también identificaron los problemas y afirman que la situación en un momento les rebasó sin embargo ahora ya están esperando el siguiente paso.