Tuxtla Gutiérrez.- Hacinamiento, sobrepoblación, extorsiones y robos, autogobierno o cogobierno, insuficiente personal de seguridad y custodia, así como deficiencias en los servicios de salud y en la atención de gente que integra grupos vulnerables. En esas condiciones encontraron los supervisores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) los centros estatales de reinserción social de sentenciados (CERSS) durante los recorridos que efectuaron como parte del “Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2018”.
Después de la visita a las prisiones, el organismo público autónomo otorgó al sistema carcelario de la entidad una calificación de 6.01, una décima más en comparación con el estudio precedente. Aunque suma tres alzas seguidas, Chiapas apenas alcanzó para colocarse en la posición 23, por debajo del promedio nacional (6.45) y todavía lejos de la mejor nota del estado en la materia que fue 6.36 en 2011.
El CERSS con el resultado más alto fue el número 14 “El Amate” (6.44), seguido del 4 Femenil de Tapachula (6.41), el 5 de San Cristóbal de Las Casas (5.59) y el 3 Varonil de Tapachula (5.54), detalló.