Durante el primer semestre de 2019 en Chiapas presuntamente ocurrieron 12 mil 549 ilícitos del fuero común, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Destacan los repuntes en hechos relacionados con el patrimonio, otros bienes jurídicos afectados y la libertad y seguridad sexual.
De los siete grandes rubros en los que dicha instancia clasificó y registró las violaciones a la ley reportadas por el Ministerio Público de la entidad en el periodo de referencia, sólo en uno hubo aumento: delitos contra la libertad y seguridad sexual. Sin embargo, al analizar las categorías y subcategorías los números contrastan.
Con más denuncias en comparación con el acumulado de enero a junio del ejercicio anterior están, entre otras faltas, acoso sexual, fraude, despojo, narcomenudeo y delitos contra el medio ambiente, que en la primera mitad del año contabilizaron en total 51, 348, 140, 444 y 28 denuncias, respectivamente.
La misma tendencia es para diversas modalidades de robo como a casa, de vehículo, a transportista, transeúnte en vía pública, institución bancaria y negocio que concentraron 424, mil 166, 37, 468, ocho y 514 denuncias, en ese orden.
Por el contrario, al comparar la primera mitad de 2019 con igual periodo del ejercicio anterior, el estado registró menos denuncias por homicidio, lesiones, feminicidio, secuestro y abuso sexual, entre otras transgresiones. De enero a junio de este año del primero hubo 590, 793 del segundo, del tercero nueve, 10 del cuarto y del quinto 87.
En el primer semestre de 2019 también hubo 38 reportes de robo a ganado, dos mil 713 de violencia familiar, cinco por trata de personas y 160 por delitos cometidos contra servidores públicos. En todos los casos las cifras en mayor o menor medida sufrieron una contracción en comparación con igual intervalo del ejercicio anterior.
La última Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre la Seguridad Pública estableció que en Chiapas 93.8 por ciento de los crímenes son notificados al Ministerio Público. Chiapas era la séptima entidad en la que existía más omisión ante ese escenario, por arriba de la Ciudad de México y Jalisco. El líder era Guerrero (96.8 por ciento).
Sólo 18 por ciento de la población mayor de edad que participó en el estado percibía que la seguridad mejoraría, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.