Durante el segundo trimestre del año, en el estado el costo de las casas compradas vía crédito registró un ajuste al alza de 7.6 por ciento, por arriba de la inflación, aunque inferior al 8.8 por ciento de la media nacional para ese mismo periodo de 2018. El movimiento ocurrió sobre todo por el encarecimiento de condominios y departamentos, según la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).
Por medio de un comunicado, dijo que entre enero y marzo pasados en el país el importe de los condominios y departamentos, la propiedad media y residencial, así como de la morada nueva acumuló un repunte de 9.9, 9.8 y 9.2 por ciento, respectivamente, mientras que la tarifa de la vivienda usada, sola y económico-social incrementó en total 9.1, 8.4 y 7.8 por ciento, en ese orden; en tanto que la tasa de interés del préstamo hipotecario no reportó modificaciones, en comparación con similar lapso del ejercicio anterior.
A causa de esos factores en ese intervalo, en México la cotización promedio del inmueble adquirido por medio de financiamiento fue de un millón 70 mil 654 pesos; el 50 por ciento de las transacciones involucraron montos menores a los 621 mil 96 pesos, detalló.
Informó que en ese trimestre los sitios en los que las casas registraron las apreciaciones más acentuadas fueron: Alcaldía Benito Juárez, Ciudad de México (12.4 por ciento); Zapopan, Jalisco y Alcaldía Cuauhtémoc, Ciudad de México (12 por ciento, en cada caso); así como Solidaridad, Quintana Roo (11.6 por ciento).
Tuxtla Gutiérrez fue ubicado en el lugar 26 con un aumento de ocho por ciento, superior al de plazas como Tapachula, Chiapas (7.7 por ciento), Toluca, Estado de México (7.1 por ciento) y Veracruz, Veracruz (6.3 por ciento), destacó.
El presidente de la delegación de la Cámara Nacional de la Industria de Promoción y Desarrollo de Vivienda (Canadevi) en la entidad, Jorge Burguete Torrestiana, señaló que el mercado inmobiliario local estuvo “decaído” en el primer semestre de 2019, debido a la inercia negativa que arrastra desde hace ocho años; así como a la menor demanda, como consecuencia la limitada capacidad de compra de la población, a causa de la reducción en los subsidios para vivienda del gobierno federal.
“Hay que recuperar ese esquema (de construcción de casas) porque es meter recursos de manera directa, inmediata al estado y tiene un efecto multiplicador en el 90 por ciento de las ramas y subramas económicas del estado. Es algo que debería impulsarse”, afirmó.