Tuxtla Gutiérrez.- El suicidio en menores de edad registra una tendencia creciente en Chiapas. De 2006 a 2015 la entidad registró tasas por esa práctica de 1.8 a 3.6 por ciento por cada 100 mil personas de entre 10 y 17 años, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Por medio de un reporte, dijo que en ese periodo a estudio la tasa de muertes autoinfligidas en infantes y adolescentes más alta correspondió a 2014 con 3.6. Hombres fueron quienes más tomaron ese decisión en todos los años, excepto en 2012 y 2013 cuando ellas superaron a ellos.
“En 2015 se registraron 4.5 suicidios de varones por cada 100 mil niños y en las niñas, la tasa es de 2.7 suicidios por cada 100 mil, lo que representa una sobremortalidad masculina de 166.7 suicidios de niños por cada 100 en niñas”, afirmó.
Informó que en ese ejercicio el estado contabilizó 316 inmolaciones. Menores de edad protagonizaron 33 casos, es decir, 10.4 por ciento del total. De ese universo, 21 decesos fueron de hombres y los 12 restantes de gente del sexo femenino, equivalente a 64 y 36 por ciento del total, respectivamente.
“En 2015 en Chiapas se registraron dos mil 732 defunciones en población de 17 años o menos. De este total 2.2 por ciento se debió a causas violentas como el suicidio y el homicidio. De las 60 muertes por estas dos causas, los homicidios significan 45 por ciento y los suicidios 55 por ciento”, detalló.
El Inegi dio a conocer que el suicido está clasificado como una muerte violenta. De 2007 a 2015 en la entidad la tasa de esa práctica en población abierta registró un incremento constante. En ese intervalo el indicador osciló entre 0.6 y 6.2 fallecimientos por cada 100 mil habitantes.
“Tanto los homicidios como los suicidios son más frecuentes entre los hombres, y en el caso de los primeros en su mayoría son resultado de la violencia interpersonal que ocurre en espacios públicos, con frecuencia vinculados a eventos como riñas callejeras, asaltos o robos”, precisó.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió el suicidio como el "acto deliberadamente iniciado y realizado por alguien en pleno conocimiento o expectativa de su desenlace fatal". Considera las defunciones de ese tipo como un asunto de salud pública. De hecho, en 2015 fue una de las principales causas de decesos en todo el mundo para la población de 15 a 29 años.
Por esa razones, la OMS nombró el 10 de septiembre como el Día Mundial de la Prevención del Suicidio. La fecha tiene como propósito promover compromisos y medidas para detectar e inhibir riesgos que deriven en pérdidas de la vida por voluntad propia.