La muerte de cuna es un suceso trágico que ha preocupado a padres y expertos en salud infantil. Guadalupe Cruz, enfermera pediátrica del Hospital General de Tapachula, con 12 años de experiencia en el rubro ha proporcionado información relevante sobre este fenómeno, destacando su conexión con la broncoaspiración y el reflujo gástrico en los bebés, aspectos clave que pueden desencadenar este acontecimiento.
Según explicó la enfermera, la mayoría de los casos de muerte de cuna están vinculados a la broncoaspiración, un proceso que ocurre cuando un bebé presenta enfermedad por reflujo gástrico. Esta condición se manifiesta cuando el bebé no logra expulsar el aire después de ingerir leche, provocando vómitos que, a su vez, pueden obstruir la vía aérea. Esto conduce a episodios de apnea obstructiva, donde el bebé deja de respirar temporalmente, lo que finalmente desencadena un paro respiratorio y una bradicardia, llevándolos a una privación de oxígeno en el cerebro y todo el cuerpo que resulta en la pérdida de la vida ya que la ventilación es de suma importancia para los recién nacidos.
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La ventilación es de suma importancia para los recién nacidos: Guadalupe Cruz Cruz
Cruz enfatizó la importancia de comprender los síntomas y señales de alerta relacionados con el reflujo gástrico en bebés, tales como la dificultad para expulsar el aire después de las comidas, vómitos recurrentes y la presencia de episodios de apnea durante el sueño, se le denomina apnea cuando dejan de respirar; estos indicios, si bien pueden parecer comunes, podrían ser cruciales para identificar posibles riesgos asociados con la muerte de cuna.
Asimismo, subrayó la relevancia de adoptar medidas preventivas, como mantener al bebé en una posición adecuada después de alimentarlo, evitar la sobrealimentación y buscar asesoramiento médico si se observan síntomas preocupantes.
En resumen, la enfermera pediátrica hizo hincapié en la necesidad de una mayor conciencia sobre la broncoaspiración y el reflujo gástrico en bebés, ya que comprendiendo estos procesos se pueden tomar medidas preventivas para reducir el riesgo de la muerte de cuna, protegiendo así la salud y seguridad de los recién nacidos.
Muertes fetales con datos del INEGI
Durante el año 2022, en México se registraron 25 mil 041 fallecimientos fetales, lo que representó una tasa nacional de 72.2 por cada 100 mil mujeres en edad reproductiva.
De estas cifras, el 83.2 % de las muertes fetales tuvieron lugar antes del parto, mientras que el 15.8 % ocurrió durante el proceso de parto. En un 1.0 % de los casos, no se detalló el momento específico del suceso.
Respecto al sexo, se encontró que el 53.0 %, equivalente a 13,270 casos, correspondió a fetos masculinos, mientras que el 37.0 %, alrededor de 9 mil 270 casos, se relacionó con fetos femeninos. En un 10.0 % de los casos, no se especificó el sexo del feto.