El Vía Crucis, una de las prácticas más emblemáticas de la Semana Santa, conmemora el doloroso camino que Jesucristo recorrió por Jerusalén, desde su condena hasta su crucifixión. En El Heraldo de Chiapas te presentamos las estaciones de esta venerada costumbre católica:
Durante muchos años, la Iglesia católica consideró 14 estaciones alusivas al Vía Crucis. Sin embargo, una reforma del Papa Juan Pablo II, implementada en 1991, cambió el número de estaciones a 15. Estas son:
- Jesús es condenado a muerte
- Cristo carga con la cruz
- Jesús cae por primera vez
- Cristo encuentra a María, su madre
- Simón de Cirene ayuda a Jesús a cargar la cruz
- Verónica limpia el rostro de Cristo
- Jesús cae por segunda vez
- Cristo consuela a las mujeres de Jerusalén
- Jesús cae por tercera vez
- Cristo es despojado de sus vestiduras
- Jesús es clavado en la cruz
- Cristo muere en la cruz
- Jesús es bajado de la cruz y puesto en los brazos de María
- Cristo es sepultado
La costumbre de realizar el Vía Crucis se originó en Jerusalén, el lugar donde, según la tradición de la Iglesia, Jesucristo fue crucificado y sepultado.
El Vía Crucis consta de 14 estaciones, cada una representa un paso o episodio de la pasión de Cristo. Posteriormente, el Papa Juan Pablo II añadió una estación más dedicada a la resurrección de Jesús.
Durante esta práctica católica, las estaciones tienen un núcleo central donde se debe rezar o realizar una meditación silenciosa, como símbolo de luto por la muerte de Dios.
Así, la tradición de realizar las estaciones del Vía Crucis tiene sus raíces en Jerusalén, representando los lugares y momentos más importantes de la pasión de Cristo durante la Semana Santa.