La hora del miedo: La misteriosa historia de la piedra de Huixtla

La leyenda cuenta la historia de un poderoso brujo de Chiapa de Corzo que necesitaba llevar una campana encantada desde Guatemala a Chiapa de Corzo

Ángel Canseco | El Heraldo de Chiapas

  · viernes 27 de octubre de 2023

Se dice que hoy en día, durante las noches, Juan No recorre los alrededores de la Piedra de Huixtla / Foto: @VisitChiapasApp

En las tierras de Chiapas, una antigua leyenda cuenta la historia de un poderoso brujo de Chiapa de Corzo que necesitaba llevar una campana encantada desde Guatemala a su tierra natal. Dado que la campana era inmensa y demasiado pesada para llevarla solo, el brujo buscó a un hombre llamado Juan No, conocido por su gran fuerza y determinación, para que lo ayudara en esta misión.

Así, el brujo y Juan No se prepararon para un largo viaje hacia un pueblo guatemalteco donde otro brujo los esperaba con la campana encantada, que estaba destinada a ser utilizada en las Fiestas Tradicionales de Chiapa de Corzo.

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El brujo anfitrión les dio una advertencia importante: bajo ninguna circunstancia debían permitir que la campana tocara el suelo, ya que, de hacerlo, se convertiría en una inmensa roca.


Foto: Secretaría de Turismo Chiapas


Con determinación y confiando en la fuerza de Juan No, emprendieron su camino. Cruzaron múltiples municipios, incluyendo Cacahoatán, Tapachula, Tuzantán y la mayor parte de Huixtla, hasta que llegaron a las montañas. Sin embargo, la fatiga comenzó a afectar a Juan, y el brujo le recordaba constantemente que no debía descansar ni permitir que la campana tocara el suelo.

A pesar del cansancio, Juan pidió un breve descanso, pero el brujo insistió en que no podían hacerlo. Juan propuso simplemente sentarse sin bajar la campana, pero el brujo le advirtió nuevamente que no permitiera que la campana tocara el suelo.

Sin embargo, el agotamiento finalmente venció a ambos, y se quedaron dormidos. No tenían forma de saber cuánto tiempo durmieron, pero al despertar, se encontraron con una sorpresa desgarradora: en lugar de la campana encantada, había una inmensa roca en su lugar. La piedra tenía la forma de la campana y había crecido más allá de su tamaño original.


Foto: Secretaría de Turismo Chiapas


A pesar de los esfuerzos de Juan No, su fuerza no era suficiente para levantar la piedra. El brujo, enfurecido por el fracaso de su misión, maldijo a Juan No, condenándolo a cuidar eternamente la gran piedra y asegurándose de que nadie le hiciera daño.

Se dice que hoy en día, durante las noches, Juan No recorre los alrededores de la Piedra de Huixtla. Según los campesinos locales, en ocasiones viaja en un caballo negro, mientras otros afirman que Juan No tiene una pata de gallo y otra de caballo. Se le atribuye la tarea de ahuyentar a quienes se acercan a la piedra por la noche, garantizando que nadie la toque o dañe.