Con la llegada del Día de Muertos, una de las tradiciones más emblemáticas de México, las ofrendas se convierten en el corazón de las celebraciones. Este altar, cargado de simbolismo y elementos representativos, es una forma de honrar a los seres queridos que han partido. Pero, ¿sabías que el número de niveles de la ofrenda tiene un significado profundo? A continuación, te explicamos los diferentes niveles y su importancia dentro de esta tradición ancestral.
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En México, representamos el Día de Muertos con altares que pueden tener diferentes formas. Existen tres tipos principales de representación:
- Altar de dos niveles
- Altar de tres niveles
- Altar de siete niveles
¿Cuál es el significado del altar de dos niveles?
La dualidad de la vida y la muerte:
Una de las ofrendas más comunes es la de dos niveles, que representa la dualidad entre el cielo y la tierra. Este tipo de altar es sencillo pero significativo. El nivel superior suele estar dedicado al mundo espiritual, donde se colocan imágenes religiosas, veladoras, e incluso una cruz de sal o cal. El nivel inferior está destinado al mundo terrenal, con alimentos, agua y objetos que pertenecieron al difunto.
¿Significado del altar de tres niveles?
Cielo, tierra e inframundo:
El altar de tres niveles incorpora la creencia de que existe un inframundo o purgatorio, representando así las tres dimensiones del ciclo de la vida: el cielo, la tierra y el inframundo. En este tipo de ofrenda, los objetos se distribuyen en tres plataformas, simbolizando el camino que deben recorrer las almas para alcanzar la paz eterna.
¿Qué significa los siete niveles del altar?
El viaje del alma:
El más tradicional y simbólico es el altar de siete niveles, que representa los siete pasos que el alma del difunto debe atravesar para llegar al descanso eterno. Cada nivel tiene un significado específico y es adornado con diferentes elementos.
- Primer nivel: Se coloca una imagen o cruz, que representa la protección del alma.
- Segundo nivel: Está dedicado a las ánimas del purgatorio, con la intención de que las almas olvidadas puedan ascender.
- Tercer nivel: En este se colocan alimentos y bebidas, como pan de muerto, para saciar el hambre y la sed de las almas.
- Cuarto nivel: Aquí se colocan los objetos favoritos del difunto, para que se sientan bienvenidos.
- Quinto nivel: Se dedica a las fotografías del difunto, recordando su presencia.
- Sexto nivel: En este nivel se colocan veladoras, cuyo fuego guía a las almas en su trayecto.
- Séptimo nivel: Representa el descanso final, y suele contener una cruz de flores o semillas, que simboliza la unión con la naturaleza y el fin del ciclo.
El número de niveles de la ofrenda no es solo una cuestión estética, sino que refleja una cosmovisión profunda y ancestral sobre la muerte y el viaje de las almas. Desde los dos niveles básicos hasta los siete, cada escalón en el altar tiene un propósito y un simbolismo especial. Esta tradición, llena de detalles y amor, permite mantener viva la conexión con los seres queridos que ya no están, asegurando que sus almas encuentren el camino de vuelta al mundo de los vivos, aunque sea por un día.
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