El medio deportivo está de luto nuevamente, pues hace unos días falleció unos de sus mejores cronistas, pero que a partir de este momento el nombre de Rigoberto León Cerpa ha quedado inmortalizado y siempre será recordado por el legado que dejó de más de 20 años de trayectoria dentro de los medios de comunicación.
El pasado 5 de mayo como a las 22:00 horas comenzó a circular la noticia en las redes sociales de la muerte de este gran personaje de la radio y televisión; de inmediato, el hecho se expandió por todos los rincones; personalidades del deporte se consternaron ante el terrible suceso y no daban crédito de lo que estaba sucediendo a uno de los iconos del periodismo.
Una de las pasiones que siempre presumió era su amor a la tauromaquia, él tuvo la fortuna de ser un matador de toros; en reiteradas ocasiones pudo compartir terna con las grandes figuras de la fiesta brava.
En la última charla que sostuvimos con Rigoberto en una conferencia de Charros que se celebró hace unos días en un conocido hotel del lado poniente de la ciudad, nos platicó que estaba en contra de la ley que prohíbe la ejecución de las corridas de toros, ya que para él era un espectáculo que muchas personas disfrutaban en las plazas que hay en todo México.
EL BEISBOL
El beisbol era otro de los deportes que más les gustaba a León Cerpa, su equipo favorito en la entidad eran los Lacandones de Chiapas; organización que se consideraba fiel fanático, del conjunto de la “Tribu”, y cada fin de semana no se perdía ningún encuentro de esta novena y muchas veces los acompañó a varias giras por la región y en el Istmo de Tehuantepec.
Los estadios que con frecuencia visitaba era el “Miguel Solís Castillejos”, inmueble que se ubica en el municipio de Arriaga. Otros de sus preferidos era el “Panchón Contreras” de Tuxtla Gutiérrez, donde todavía el pasado domingo acudió a presenciar los partidos del fin de semana de la Liga Municipal.
Esa fue la última vez que se le vio al “Matador” en vida, fiel a su costumbre portaba una gorra para cubrir su cabeza, usaba gafas obscuras para que el sol no les lastimara sus ojos. En una de sus manos siempre llevaba un cigarro, que cuando ameritaba la oportunidad le daba un toque.
PROMOTOR DEL DEPORTE
Una de las misiones que tenía nuestro compañero era promover a los atletas en sus respectivas disciplinas. En sus programas de televisión y de radio, Rigoberto invitaban a los deportistas para que dieran a conocer los resultados obtenidos en los campeonatos nacionales como internacionales; por lo que siempre se ganó el cariño de los atletas, quienes sabían que él no era solamente un aliado, sino un amigo.
Una de las organizaciones que apoyó desde hace más de una década fue al grupo explorador Pañuelo Rojo; en 1960 un grupo de ocho jovencitos se aventuraron en cruzar por primera vez las aguas del Cañón del Sumidero.
Él fue el único que se dio a la tarea de contactar a Martín Pérez Chamé y a Nabor Vázquez, únicos sobrevivientes de este equipo, quienes desde entonces jamás recibieron el apoyo de gobierno del estado; pese haber concretado la hazaña que tiene más de cuatro décadas.
A pesar de la negativa, el comentarista hizo una serie de reconocimientos a estos personajes, a quienes bautizó como los héroes del olvido; y que hoy quedarán desamparados nuevamente.
LA ESCUELA
Como cualquier reportero de experiencia, siempre se preocupó por formar a nuevas generaciones que tenían el sueño por ingresar a los medios, entre los comentaristas que formó están Armando Coutiño y Daniel Chanona, éste último ha logrado destacar en Univisión Deportes, una de las cadenas televisivas más importante en los Estados Unidos.
ASOCIACIÓN
Uno de los sueños que logró hacer fue fundar su asociación de comentaristas deportivos, organismo que reunió a gente de experiencia en el periodismo como a las nuevas generaciones.
Ese fue uno de los aciertos de Rigoberto León Cerpa, quien cada año efectuaba una fiesta para conmemorar el aniversario de sus respectivos programas. En el festejo llegaban personalidades no solamente del estado, sino de nivel nacional.
En la última fiesta que asistimos se contó con la presencia del doctor Alfonso Morales, quien narró la trayectoria de éste en los toros y de cómo fue que se conocieron en la Ciudad de México, donde unieron lazos de amistad.
EL RECUERDO
Por último, será difícil para sus compañeros ya no ver al “Matador” en las conferencias, cada vez que tenía la oportunidad contaba una de sus vivencias o una anécdota que hacía reflexionar a todos.
Ya nunca más volveremos escuchar la voz de Rigoberto, cuando se sentaba, cruzaba las piernas y con un cigarro en la mano comenzaba a narrar un episodio de la historia del deporte en Chiapas; hasta los atletas dejaba asombrados por sus conocimientos.
Hoy el medio añora la partida de un gran ser humano, de un comunicador, pero sobre todo de un amigo. Hace unos días se apagó el micrófono del deporte con garra, pero en el cielo sabemos que seguirá platicando de las hazañas de los jóvenes deportistas del estado.
En memoria de Rigoberto León Cerpa.