El tema Turismo es uno de los fundamentales para nuestro Estado. Quién de nosotros no se ha sentido absolutamente orgulloso de recibir a visitantes, familiares, amigos que visitan Chiapas y se quedan con un agradabilísimo impacto por las bellezas naturales, la gastronomía que ofrecemos, la gente, las costumbres y tradiciones. Lo mismo ocurre con quienes de alguna manera nos son ajenos, pero que con afán de turistear por estas latitudes, se llevan la gran sorpresa al presenciar cosas y situaciones, paisajes, encantadores escenarios natrales, que les resultan maravillosos.
Por supuesto que no especificaré aquí esos lugares, el listado sería innumerable pero en nuestro particular imaginario están los lugares más destacados y que nos son los más entrañables, en mi caso Montebello, la parte de la selva en Las Nubes, Las Guacamayas, el Chiflón y mi propio poblado, Comitán. Pero no puedo dejar de considerar hermosísimos lugares también en los Altos; las tierras bajas de los mayas como Palenque, Bonampak, Yaxchilán,; o en el litoral, La Encrucijada, la zona de los esteros y sus manglares, los más altos de América, o el Soconusco mismo con sus fincas cafetaleras, la tierra del cacao y demás.
Pero lo que la mayoría de las veces no está a nuestro alcance, son las estadísticas registradas sobre flujos de turismo y características, que deberían ser pan de cada día para comprender mejor el fenómeno de la industria sin chimeneas en Chiapas.
Lejos estamos de saber que anualmente llegan a tierras chiapanecas alrededor de 6.5 millones de visitantes, que casi equivalen dos veces la población local del Estado. Que de ellos el 89 por ciento son nacionales y un 11 por ciento extranjeros. Los nacionales vienen de los siguientes destinos y con los porcentajes que a continuación se detallan: 18% de la Ciudad de México; 15% del Estado de México; y un 8% de Veracruz. Aunque los hay también que vienen de Tabasco, Campeche, Quintana Roo, e inclusive, Puebla, Jalisco, Sinaloa y el Bajío.
De los turistas extranjeros ese 11% del total que llegan anualmente, el 30% proviene de Guatemala (nuestro mercado natural y al cual debe atenderse mucho más por evidentes razones); 12% de España y un 11 % de Francia.
De la totalidad de turistas –estadísticas del 2018-, un 77% lo hizo vía terrestre (autobús y automóvil), 13 % en avión. Y entre los lugares más visitados se encuentran, en orden descendente: Tuxtla Gutiérrez con un 22%; San Cristóbal de Las Casas 18%; Palenque con un 14%; y Tapachula, Chiapa de Corzo, y Comitán, consecutivamente. Lo cual significó una media anual de 40% de ocupación hotelera.
O sea que aún falta mucho por aprovechar el potencial instalado –aumentarlo inclusive- y realizar los trabajos adecuados para posicionar mundialmente a Chiapas como un destino turístico primordial. Y en ese sentido, el turismo de naturaleza y de culturas vivas, será el camino a seguir, tanto como el de aventuras, puesto que de acuerdo con las estadísticas el 75% de los visitantes que viene a Chiapas tiene como propósito el turismos de naturaleza y aventura, un 24% de cultura y tan sólo un 1 % de negocios.
Del total de visitantes, el 89% se hospeda en hotel; un 7 % con familiares y amigos y un 2% en casa de huéspedes,. Siendo así que la derrama económica anual significa alrededor de 22 mil millones de pesos.
De acuerdo con los flujos mundiales de turismo, en las perspectivas del desarrollo estatal será fundamental la implementación de medidas que permitan una mayor seguridad en nuestro Estado, tanto en vialidad carretera como en los poblados, lo cual nos permitiría tener razones contundentes de que podremos tener un futuro halagüeño con resultados muy favorables del sector.
La tasa de crecimiento en el sector turístico ha sido vertiginosa en las últimas dos décadas. En mi particular caso recuerdo con una sensación de ternura el hecho de que me tocó ver el desarrollo de Comitán, por ejemplo, que en 1997 contaba con alrededor de 14 hoteles y posadas, cuando aún no se le incluía, como ocurrió después de manera natural, en los circuitos turísticos del Estado, tiene en la actualidad más de 140 hoteles y posadas, hecho que habla del incontenible desarrollo que ha experimentado en cuanto a su desarrollo turístico regional. Ni qué decir de otros destinos que ya lo eran pero que han tenido similar porcentaje de crecimiento –alto- en el lapso comentado.
Así que habrá mucho que trabajar al respecto: Infraestructura, calidad en los servicios creación de productos que puedan ser motivantes de un mayor desarrollo turístico como un festival de cine de grandes dimensiones o los incentivos para vender al estado y sus localidades como importantes locaciones para el desarrollo de las empresas fílmicas. En este sentido, la suma de esfuerzos entre turismo y cultura, para la conformación de productos y destinos turísticos culturales, es un sendero muy probable en los próximos años para el desarrollo generalizado de Chiapas.
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