/ lunes 24 de junio de 2024

Paradigmas / Y ahora ¿qué sigue?

Una vez pasada la intensidad de las elecciones y una vez definida las nuevas autoridades, resulta de suma importancia la actuación constante y dinámica de la sociedad para asegurar que las promesas de campaña de las ahora autoridades electas sean llevadas a cabo en tiempo y en forma. Las próximas autoridades locales (Gobernador, Diputados locales, Presidentes municipales y regidores) tienen un firme y real compromiso social de hacer realidad las propuestas realizadas durante la campaña. Si bien no existe un órgano ciudadano que supervise y dé seguimiento a las acciones de gobierno, y las que deberían de hacerlo (Diputados y Regidores), casi siempre suelen ser cómplices de los actos de corrupción u omisión, serán los llamados “líderes sociales” y adversarios políticos que no lograron alcanzar una posición de autoridad quienes, preparándose para futuras contiendas, posiblemente tengan un papel relevante en el seguimiento y supervisión de acciones u omisiones de gobierno.


No obstante, aquí menciono algunas de las sugerencias que, ojalá las autoridades electas tomen en cuenta: a) el Gobernador y los Presidentes municipales deberán realizar un honesto (ojalá puedan hacerlo) ejercicio de selección de los futuros funcionarios, funcionarios que tengan necesariamente tres características básicas, 1) perfil profesional para el cargo a ocupar (preferentemente con estudios de posgrado en la materia), 2) experiencia comprobada en el área de atención, y 3) honestidad franca y probada (incorruptible); b) planeación estratégica y realista, basada en un programa de acción sectorial discutido y consensuado con la sociedad civil, académicos expertos y empresarios del área de atención; c) recursos económicos suficientes para la pronta y correcta actuación de los funcionarios; d) implementación de un sistema constante de evaluación de desempeño de los funcionarios, evaluación que permita la adaptación de políticas, estrategias y acciones de acuerdo a las realidades sociales y que permita el reconocimiento de los buenos funcionarios y las sanciones ejemplares para funcionarios corruptos y/o incompetentes.


Indudablemente que resulta poco sencillo incorporar funcionarios con las características antes señaladas, pero no es imposible. Es indudable que existen profesionales con perfil y experiencia, pero que muchas veces no son visibles ante el amontonamiento de recomendados, amigos y familiares, que muchas veces no cuentan con perfil ni experiencia, es necesario que las autoridades electas, realicen un ejercicio real y honesto en la selección de sus funcionarios, quizás la mejor opción es realizar concursos de oposición a los cargos de primer (secretarios), segundo (subsecretarios) y tercer nivel (directores).


Finalmente, y en concordancia a mi área de trabajo, la sugerencia es en el ámbito municipal, separar a la Dirección de Ecología Municipal de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, y crear el Instituto Municipal de Ecología y Cambio Climático (IMECC). Cabe destacar, que este instituto fue incorporado en el Plan de Desarrollo Municipal del fallecido Dr. Óscar Gurría, sin embargo, su inesperado fallecimiento y la no continuidad del Plan por la autoridad municipal que sustituyó al Dr. Gurría, no se logró la creación de dicho instituto.


El IMECC debe ser una institución con la suficiente autonomía de organización, operativa y financiera para lograr avances significativos en la conservación y utilización sostenible de los recursos naturales y la mitigación y adaptación al cambio climático del municipio de Tapachula, Chiapas. El IMECC debe ser una organización socialmente responsable, con funcionarios profesionales, con sentido humanista y honestos, pues en la conservación de los recursos naturales y la atención al cambio climático, nos jugamos el bienestar de todos, así como el futuro de las generaciones próximas.


vicente.castro@unach.mx



Una vez pasada la intensidad de las elecciones y una vez definida las nuevas autoridades, resulta de suma importancia la actuación constante y dinámica de la sociedad para asegurar que las promesas de campaña de las ahora autoridades electas sean llevadas a cabo en tiempo y en forma. Las próximas autoridades locales (Gobernador, Diputados locales, Presidentes municipales y regidores) tienen un firme y real compromiso social de hacer realidad las propuestas realizadas durante la campaña. Si bien no existe un órgano ciudadano que supervise y dé seguimiento a las acciones de gobierno, y las que deberían de hacerlo (Diputados y Regidores), casi siempre suelen ser cómplices de los actos de corrupción u omisión, serán los llamados “líderes sociales” y adversarios políticos que no lograron alcanzar una posición de autoridad quienes, preparándose para futuras contiendas, posiblemente tengan un papel relevante en el seguimiento y supervisión de acciones u omisiones de gobierno.


No obstante, aquí menciono algunas de las sugerencias que, ojalá las autoridades electas tomen en cuenta: a) el Gobernador y los Presidentes municipales deberán realizar un honesto (ojalá puedan hacerlo) ejercicio de selección de los futuros funcionarios, funcionarios que tengan necesariamente tres características básicas, 1) perfil profesional para el cargo a ocupar (preferentemente con estudios de posgrado en la materia), 2) experiencia comprobada en el área de atención, y 3) honestidad franca y probada (incorruptible); b) planeación estratégica y realista, basada en un programa de acción sectorial discutido y consensuado con la sociedad civil, académicos expertos y empresarios del área de atención; c) recursos económicos suficientes para la pronta y correcta actuación de los funcionarios; d) implementación de un sistema constante de evaluación de desempeño de los funcionarios, evaluación que permita la adaptación de políticas, estrategias y acciones de acuerdo a las realidades sociales y que permita el reconocimiento de los buenos funcionarios y las sanciones ejemplares para funcionarios corruptos y/o incompetentes.


Indudablemente que resulta poco sencillo incorporar funcionarios con las características antes señaladas, pero no es imposible. Es indudable que existen profesionales con perfil y experiencia, pero que muchas veces no son visibles ante el amontonamiento de recomendados, amigos y familiares, que muchas veces no cuentan con perfil ni experiencia, es necesario que las autoridades electas, realicen un ejercicio real y honesto en la selección de sus funcionarios, quizás la mejor opción es realizar concursos de oposición a los cargos de primer (secretarios), segundo (subsecretarios) y tercer nivel (directores).


Finalmente, y en concordancia a mi área de trabajo, la sugerencia es en el ámbito municipal, separar a la Dirección de Ecología Municipal de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, y crear el Instituto Municipal de Ecología y Cambio Climático (IMECC). Cabe destacar, que este instituto fue incorporado en el Plan de Desarrollo Municipal del fallecido Dr. Óscar Gurría, sin embargo, su inesperado fallecimiento y la no continuidad del Plan por la autoridad municipal que sustituyó al Dr. Gurría, no se logró la creación de dicho instituto.


El IMECC debe ser una institución con la suficiente autonomía de organización, operativa y financiera para lograr avances significativos en la conservación y utilización sostenible de los recursos naturales y la mitigación y adaptación al cambio climático del municipio de Tapachula, Chiapas. El IMECC debe ser una organización socialmente responsable, con funcionarios profesionales, con sentido humanista y honestos, pues en la conservación de los recursos naturales y la atención al cambio climático, nos jugamos el bienestar de todos, así como el futuro de las generaciones próximas.


vicente.castro@unach.mx